NUEVA YORK.- Funcionarios del Gobierno de George W. Bush evalúan un plan que daría más derechos a los detenidos en Bahía de Guantánamo, en un esfuerzo por cerrar las instalaciones y posiblemente trasladar a algunos detenidos a Estados Unidos, informó este domingo el diario The New York Times (NYT).
Citando a funcionarios estadounidenses que participan en las discusiones, el diario dijo que las propuestas tratadas para reformar los procedimientos que determinan si los detenidos se encuentran en condiciones adecuadas, incluyen garantizarles representación legal en las audiencias.
También está bajo discusión si se dará a los jueces federales, en lugar de a oficiales del Ejército, la autoridad para decidir si los sospechosos son detenidos, informó NYT.
Funcionarios debatían si trasladar a los detenidos a Estados Unidos debería incluir mejores protecciones, indicó el Times.
Si los detenidos son reubicados, "hay un reconocimiento de que por razones políticas necesitarías procedimientos más robustos que los actuales en Guantánamo", indicó un funcionario de alto rango citado por el periódico. El funcionario habló bajo condición de anonimato.
Funcionarios dijeron que las actuales discusiones sobre las maneras de cerrar Guantánamo habían ganado relevancia en las últimas semanas porque el secretario de Defensa, Robert Gates, ordenó a sus asesores que desarrollaran una propuesta para lograrlo.
Algunos funcionarios sostienen que dar mayores derechos a los detenidos podría ayudar estratégicamente al Gobierno, al remover un caso presentado por sospechosos de Guantánamo ante la Corte Suprema de Estados Unidos que les podría dar más poder para objetar sus detenciones, dijo el Times.
Abogados dentro y fuera del Gobierno dijeron que una propuesta detallada de este último para ampliar las protecciones legales a los detenidos, podría influir en los jueces y llevarlos a concluir que no necesitan tomar una decisión en el caso Boumediene contra Bush.
Funcionarios dijeron al periódico que las discusiones sobre derechos de los detenidos no eran un reconocimiento de políticas erróneas en Guantánamo, sino más bien una señal de que Washington está evaluando las consecuencias de cerrar la prisión y reubicar a los reos.
Pero algunos funcionarios están proponiendo cambios de políticas más grandes, indicó el reporte.
Se necesitarían leyes para autorizar que los detenidos considerados como una amenaza sean detenidos "hasta el fin de las hostilidades" en la guerra contra el terrorismo antes de que puedan ser trasladados, indicó el Times, y antes debería construirse un lugar seguro en Estados Unidos.
"Estos son hombres peligrosos", dijo Sandra Hodgkinson, segunda asistente de la secretaría de Defensa para asuntos de detenidos. "Debe haber una manera apropiada para manejar eso", agregó.
Hodgkinson citó consideraciones prácticas sobre ampliar los derechos de los detenidos si son trasladados, dijo el NYT.
Ella también destacó que funcionarios del Pentágono están insistiendo en que los combatientes detenidos fuera del país podrían permanecer bajo custodia del Ejército, hasta el punto en que no se los considere una amenaza.
La propuesta de brindar abogados a los detenidos para audiencias sobre sus casos cuando sean evaluados por jueces, también necesitaría estar limitada a aquellos que se encuentren dentro de Estados Unidos.
Refiriéndose a los 24.500 detenidos que se encuentran en Irak, ella preguntó "¿Cómo podríamos brindar 25.000 abogados en Irak?", agregando que eso sería imposible.