LA PAZ.- Dirigentes cívicos de seis de los nueve departamentos de Bolivia convocaron esta noche a iniciar mañana una "resistencia civil movilizada" contra el gobierno de Evo Morales.
La convocatoria la hizo Branko Marinkovick en nombre de los dirigentes cívicos de Santa Cruz, Cochabamba, Chuquisaca, Tarija, Beni y Pando, al termino del paro de 24 horas que se cumplió hoy en esos departamentos.
Al mismo tiempo, convocó a iniciar el lunes una huelga de hambre en todo el país, comenzar gestiones para profundizar el proceso de autonomías departamentales y enviar misiones al exterior para denunciar al gobierno boliviano de conculcar la Constitución y los derechos humanos.
Marinkovick, presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, es coordinador del Consejo Nacional por la Democracia (Conalde) creado por las organizaciones cívicas de los seis departamentos que iniciaron hoy la resistencia contra el gobierno.
Con el prefecto (gobernador) de Santa Cruz a su derecha, el dirigente cívico pronunció un discurso en el que le pidió al Presidente que "le pida perdón" a Sucre por la muerte de tres personas en los enfrentamientos de la gente de esa ciudad con policías y campesinos que custodiaban a la Constituyente.
Denunció como ilegal la aprobación del proyecto de nueva Constitución, el sábado en un local militar y en ausencia de la oposición y bajo presión de miles de campesinos, así como la aprobación del descuento de presupuesto a las regiones para pagar una renta de vejez.
"Señor Morales, sólo si retrocede en todas las ilegalidades cometidas por su gobierno habrá posibilidad de salvar la democracia en Bolivia", advirtió.
"Recapacite y vuelva sobre sus pasos, señor Morales. Lucharemos hasta el final. No nos van a derrotar por cansancio", advirtió.
Santa Cruz es bastión de la oposición al gobierno y tanto su prefecto, Ruben Costas, como Marinkovick, son enemigos declarados del gobierno.
El presidente Morales, por su parte, atribuyó a "un pequeño grupo de familias oligárquicas y terratenientes" de Santa Cruz dirigir la resistencia contra el proceso de cambios y advirtió con recurrir a los movimientos sociales para derrotarlos.