LIMA.- El ex presidente peruano Francisco Morales Bermúdez negó hoy cualquier vínculo con la "Operación Cóndor", de represión ilegal a la izquierda en Sudamérica en la década de 1970, después de que versiones de prensa señalaran que una jueza italiana tiene intención de procesarlo.
En diálogo con el canal N de televisión, Morales Bermúdez afirmó que durante su gobierno (1975-1980) no hubo "guerra sucia" contra la subversión, entre otras cosas porque en Perú no había para entonces grupos subversivos.
"A veces estos jueces internacionales quieren tomar ciertas posiciones que los hagan famosos", afirmó el general en retiro, de 86 años, quien de todas maneras expresó su intención de "ponerse a derecho".
Los nombres de Morales Bermúdez y de su presidente de Consejo de Ministros, Pedro Richter Prada, aparecen según versiones periodísticas procedentes de Roma en una lista de unas 140 personas, entre ex dictadores, ex ministros y ex jefes de inteligencia de Argentina, Bolivia, Brasil, Perú, Paraguay y Uruguay, a los que una jueza quiere procesar por la desaparición de 125 italianos.
Morales Bermúdez afirmó que el también llamado "Plan Cóndor" fue aplicado "por los países del Cono Sur, vale decir, Chile, Argentina, Uruguay y Paraguay", para "enfrentar a la subversión". No obstante, destacó, la subversión en Perú arrancó en 1980, cuando él ya no era presidente.
El ex presidente gobernó de facto Perú tras deponer en 1975 al dictador izquierdista Juan Velasco Alvarado, y en 1980 le devolvió el poder a los civiles después de una elección democrática. Aunque en su período hubo denuncias de violaciones a los derechos humanos, éstas languidecieron al ser comparadas con lo que ocurría entonces en el sur del continente.
Según Morales Bermúdez, la noticia de su involucramiento le parece "insólita", pero él estará presto a "informar a quien tenga que informar" sobre sus actuaciones.