Jesuitas eligieron como superior general al español Adolfo Nicolás

ROMA.- Más de 200 delegados de la congregación general  de los jesuitas eligieron este sábado en Roma al español Adolfo Nicolás como  Prepósito General, anunció oficialmente la Compañía de Jesús.

El nuevo superior general, de 71 años, popularmente llamado el "Papa negro", quien fue misionero por más de 40 años en Japón, ejercía como presidente de la Conferencia Jesuita de Asia del Este y Oceanía y se formó como teólogo en Tokio, según indicó la agencia católica I-Media.

Considerado un experto en asuntos asiáticos, Nicolás fue elegido por mayoría de votos.En total 217 delegados con derecho a voto, en representación de los casi 20.000 jesuitas del mundo, votaron en la Curia Generalicia de Roma al religioso español que guiará a los jesuitas en el siglo XXI.

"El sábado 19 de enero, tras cuatro días de oración y conversación, el  Padre Adolfo Nicolás ha sido elegido Superior General de la Compañía de Jesús  por los 217 electores que han llegado a Roma desde todos los lugares del mundo", indicó en un breve comunicado la orden religiosa. Se trata del 29° sucesor de San Ignacio de Loyola, fundador en 1534 de la  influyente orden religiosa, la congregación más numerosa de la Iglesia católica.

El nuevo superior general, nacido en Palencia, España, el 29 de abril de 1936, se licenció en filosofía en la universidad de Alcalá, España, a inicios de los años 60, tras lo cual se trasladó a Japón, donde se formó en teología y se ordenó como sacerdote, en 1967.

Padre Nicolás fue elegido en el segundo escrutinio. Concluida la votación, el "Prepósito General" saliente, el religioso Peter Hans Kolvenbach, junto con el secretario de la Congregación y su asistente, juraron a Dios "cumplir fielmente el deber de recibir y hacer públicos los votos", que fueron luego recolectados y contados. Nicolás remplazará a Kolvenbah, quien renunció oficialmente el lunes pasado  al cargo --a pesar de ser vitalicio-- después de 25 años al frente de la Compañía, por razones de edad.

Padre Kolvenbach (80 años) fue elegido en 1983 con el consentimiento del  papa Juan Pablo II en substitución del carismático padre Pedro Arrupe, conocido por sus desencuentros con el Vaticano, quien se retiró, demasiado enfermo para  seguir gobernando la compañía.

En total 40 delegados representan a los jesuitas de América Latina, congregación que atraviesa una grave crisis de vocaciones por la falta de nuevos adeptos y el surgimiento de grupos más jóvenes.