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Santiago: Viernes 27 de septiembre del 2024 | Actualizado 07:44
GAZA.- Cuatro días después del cierre total de la Franja de Gaza, Israel permitió hoy un envío único de combustible y medicamentos, gracias a lo cual unos 800.000 palestinos volvieron a tener luz tras unas 40 horas.
Un portavoz israelí confirmó que dos pasos fronterizos fueron abiertos para camiones con combustible y medicinas, así como ayuda humanitaria.
Los camiones llevan 2,2 millones de litros de diésel, que según el portavoz del Ministerio del Exterior, Arieh Mekel, es suficiente para que la única central eléctrica que existe en la región funcione durante una semana. Otros 500.000 litros de diésel para generadores se encuentran de camino a los hospitales.
También pasaron unos 50 camiones con productos de primera necesidad, como alimentos y medicamentos a través de Kerem Shalom, entre ellos 13 transportes con ayuda humanitaria donada por Jordania.
La semana pasada Israel había impuesto un cierre total a la Franja de Gaza, en respuesta al continuo lanzamiento de misiles por parte de extremistas palestinos contra el sur del territorio israelí.
La central eléctrica se había visto obligada entonces a suspender su funcionamiento en la noche del domingo debido a la falta de combustible. El principal hospital de Gaza, el de Shiffa, se vio obligado a funcionar asimismo con un generador de emergencia debido al corte de electricidad.
Ante la creciente presión internacional, el Ministerio de Defensa de Israel anunció anoche que permitiría un suministro único de diésel para la central eléctrica de Gaza, que aporta alrededor de un tercio de la energía total que se consume en la Franja.
El Primer Ministro israelí, Ehud Olmert, dejó en claro, sin embargo, que el bloqueo a la Franja de Gaza no se levantará hasta que los extremistas palestinos dejen de disparar misiles contra Israel.
El portavoz Mekel indicó que la medida es única, pero podría repetirse de acuerdo a cómo evolucionen los hechos en base a los ataques con Qassam y por otro lado la situación humanitaria.
Según la radio israelí, esta mañana cuatro misiles de fabricación casera Qassam lanzados desde la Franja de Gaza impactaron nuevamente en la franja fronteriza israelí.
Pese a ello, los militares israelíes afirmaron que ha habido una significativa disminución de la cantidad de cohetes en los últimos días, en comparación con la fuerte escalada de la semana pasada, cuando en menos de tres días cayeron sobre la ciudad israelí de Sderot, el puerto de Ashkelon y otras zonas cercanas a la Franja, más de 130 cohetes y proyectiles de mortero.
Los miembros árabes llamaron hoy a otro encuentro del Consejo de Seguridad de la ONU para debatir la situación en Gaza, tras el registrado ayer, que terminó sin resultados.
Manifestaciones
En tanto, miles de palestinos, mucho de ellos mujeres con banderas del grupo radical Hamas, atacaron el puesto fronterizo de Rafah entre el sur de la Franja de Gaza y Egipto.
El grupo rompió un arco de hierro pero fue rechazado por los guardias fronterizos, que usaron cañones de agua para impedir su entrada en Egipto. Testigos señalaron que también hubo tiros. Entre los manifestantes había pacientes que exigían entrar en el país vecino para recibir tratamiento médico.
Cientos de árabes israelíes con banderas palestinas se manifestaron a su vez junto al paso de Erez entre Israel y el norte de la Franja de Gaza, para expresar su solidaridad con los palestinos y exigir el fin de aislamiento.
"Tenemos que actuar para acabar con el sitio y debemos actuar por un cese del fuego mutuo", dijo Ahmed Tibi, de la Lista Árabe Unida, que se manifestó junto con otros diputados árabes de la Knesset.
De forma paralela hubo una contramanifestación de decenas de israelíes de derecha, que calificaron de "traidores" a los árabes y demandaron el fin del bombardeo diario con cohetes desde la Franja de Gaza.
