ELN niega autoría de masacre a campesinos en Colombia

BOGOTÁ.- El grupo guerrillero colombiano Ejército de Liberación Nacional (ELN) negó que haya sido el responsable de una matanza de nueve campesinos ocurrida el pasado 9 de agosto en el suroeste del país, según un comunicado divulgado hoy en internet.

La masacre fue cometida a corta distancia del municipio de El Tambo, en el departamento de Cauca, y fue atribuida por el gobierno y autoridades regionales al ELN. El vicepresidente colombiano, Francisco Santos, comentó que la supuesta acción del ELN demostraba que el grupo no tiene intenciones de avanzar en las conversaciones entre las partes, que comenzaron en 2005.

El ELN, en un mensaje fechado el 12 de agosto y publicado en la página de Internet "Voces de Colombia", afirmó que Santos "inventó una nueva mentira", pues un oficial de las Fuerzas Armadas dijo que la masacre había sido cometida por delincuentes comunes que querían robar a las víctimas.

"Santos esta vez fue más lejos, al afirmar que la mayoría de las estructuras del ELN estaban dedicadas al narcotráfico, razón por la que era muy difícil adelantar un proceso de paz con nuestra organización. De nuevo miente el vicepresidente, pues si de algo puede hablar con autoridad moral el ELN, es de no estar inmiscuido en el narcotráfico, deslinde ratificado por nuestro último Congreso Nacional realizado hace dos años", señaló el grupo.

La administración del presidente Álvaro Uribe y el ELN iniciaron conversaciones en Cuba en diciembre de 2005, pero el proceso está estancado desde hace un año, cuando las partes no lograron ponerse de acuerdo en el mecanismo para verificar una declaración bilateral de cese del fuego.

El gobierno pidió a la organización armada que concentrara a sus cerca de 3.500 miembros en un mismo lugar para facilitar la verificación de organismos internacionales, a lo cual se negó el ELN.

"Si Santos quiere que hablemos del fallido proceso de paz intentado entre su gobierno y el ELN, podemos reiterar que los diálogos se obstruyeron cuando el gobierno colocó como condición la concentración e identificación de nuestras fuerzas", afirmó el movimiento rebelde.

"Con esa exigencia de rendición camuflada, el gobierno dio al traste con este diálogo, porque un proceso de paz auténtico en Colombia lejos de ser la claudicación de una de las partes, es la búsqueda de salidas convenidas que den un horizonte a la superación del conflicto social y armado que vive la patria", añadió.

El ELN es el segundo grupo guerrillero de Colombia después de las FARC, que cuentan con unos 8.000 integrantes, según diversas fuentes.