BANGKOK.- Al menos cinco personas, entre ellas un soldado y policía, murieron en una nueva ola de ataques de los rebeldes en la conflictiva región musulmana del sur de Tailandia, indicaron hoy fuentes policiales.
En un ataque ocurrido hoy, un soldado murió al ser alcanzado por disparos realizados por un grupo de insurgentes contra un puesto militar de la provincia de Pattani, a unos 1.000 kilómetros al sur de Bangkok.
También un policía perdió la vida y otro resultó herido grave cuando cerca de una veintena de agentes mantuvieron un intenso tiroteo con militantes del movimiento separatista islámico que se había atrincherado en unas viviendas de una aldea de la vecina provincia de Narathiwat, el pasado lunes, señaló un portavoz de la comisaría regional.
Otros tres civiles, incluido un miliciano de la fuerza de defensa civil, murieron el lunes en diferentes ataques efectuados por rebeldes en diversos pueblos de la región, en la que rige el estado de excepción en respuesta al persistente clima de violencia.
Los ataques con armas ligeras, asesinatos y atentados con bomba se suceden casi a diario en las tres provincias de mayoría musulmana, pese al despliegue de 31.000 agentes de las fuerzas de seguridad y la declaración del estado de excepción en la región.
El movimiento separatista musulmán, formado por media decena de grupos, retomó la lucha armada en enero de 2004.
A principios de 2008, el Gobierno admitió por primera vez la relación entre la red terrorista Al Qaeda y los insurgentes en el sur, y reconoció que la situación había empeorado desde que los rebeldes reciben armas y dinero procedentes del narcotráfico.
Tailandia se anexionó en 1902 el antiguo sultanato malayo de Pattani, que dividió después en las provincias de Pattani, Yala y Narathiwat.