JERUSALÉN.- Irán es “un Estado muy débil en una situación convulsa” que “no puede soportar verdaderas sanciones” por la “vulnerabilidad” de sus bancos y compañías de navegación, dijo hoy el número dos de la diplomacia israelí, Daniel Ayalón.
"Si el mundo insiste en imponer estrictas sanciones contra ellos (Irán), quizás no sea necesaria una acción militar,” subrayó Ayalón en un comunicado difundido por su ministerio.
Ayalón, del partido ultraderechista Israel Beitenu, ve “posible detener a Irán por medios diplomáticos” porque “todavía no ha cruzado el 'punto de no retorno,” en la obtención del arma nuclear.
Para ello, asegura, Israel y los Estados Unidos deben coordinar sus posturas ante Teherán, uno de los objetivos del viaje a Washington iniciado la pasada madrugada por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, para entrevistarse con el presidente Barack Obama.
"En mi opinión, Israel no actuará contra Irán sin coordinarse con los Estados Unidos, pero también esperamos que ellos se coordinen a su vez con nosotros,” aclaró.
Ayalon también empleó la nota de prensa para replicar al presidente sirio, Bachar Al Asad, quien el pasado viernes manifestó en Turquía su disposición a retomar el diálogo con Israel en cuanto haya un “socio” para la paz en el Estado judío.
"Asad no está interesado en la paz, sino en un proceso de paz (...) para sacar a su país del aislamiento internacional y deshacerse de la presión de la comunidad internacional. Es imposible desear la paz y apoyar y armar al mismo tiempo a Hizbulá, Hamás y la Yihad Islámica,” replicó el viceministro de Asuntos Exteriores de Israel.
A juicio de Ayalón, es Al Asad y no Netanyahu quien rechaza el diálogo sincero porque “sabe muy bien que tendría que pagar el precio de la normalización y abrir su país a Occidente, lo que podría suponer la caída de su régimen”.
Damasco, pues, “debe ir a un proceso negociador sin condiciones previas,” apuntó en alusión a la devolución de los Altos del Golán (ocupados por Israel desde la Guerra de los Seis Días de 1967), el punto de partida de las anteriores negociaciones entre ambos países.
Siria e Israel mantienen congelada sus conversaciones indirectas de paz con mediación turca desde que el pasado diciembre Israel lanzase una ofensiva en Gaza en la que murieron unos 1.400 palestinos, en su mayoría civiles.
Damasco pide la devolución de los Altos del Golán para firmar la paz con Israel, pero Netanyahu ha reiterado en las últimas semanas que nunca entregará esa meseta al noreste del Mar de la Galilea.