LONDRES.- El británico Ronnie Biggs, que se hizo famoso por su participación en el robo del tren Glasgow-Londres en 1963, celebrará el sábado su 80 cumpleaños como un hombre libre, pero permanecerá en el hospital donde está ingresado en un estado de salud precario.
Una portavoz del Ministerio de Justicia dijo a principios de esta tarde (local) que todos los documentos necesarios para su liberación habían sido firmados y que los tres guardias que custodiaban a Biggs en el hospital de Norwich (este de Inglaterra) habían abandonado su habitación.
"Mi padre es ahora un hombre libre y eso es todo lo que hay que decir", declaró emocionado su hijo Michael a los periodistas que lo esperaban en el exterior del hospital de Norwich (este de Inglaterra), al que Biggs fue trasladado la semana pasada con un cuadro de neumonía severa.
"He tenido un momento en privado con mi padre para darle las gracias por aguantar", agregó Michael, nacido en Brasil durante los años en que su padre vivió refugiado en ese país para escapar a las autoridades británicas.
El ministro de Justicia británico, Jack Straw, anunció ayer su decisión de concederle "una liberación compasiva por motivos médicos".
"Prácticamente no cambia mucho, porque mi padre permanecerá en el hospital, pero espiritualmente para la familia, será algo muy bueno que esté libre", había declarado su hijo Michael tras conocer la noticia.
Antes de la neumonía, Biggs estaba ya sumamente debilitado por los numerosos problemas de salud que tuvo en los últimos años, incluidos varios ataques que le impiden hablar o caminar, y le obligan a alimentarse mediante una sonda nasal. Los médicos creen que "no hay muchas esperanzas" de que se recupere.
Su abogado, Giovanni Di Stefano, consideró ayer en la cadena de televisión Sky News que le devolvían la libertad "para morir".
Biggs está encarcelado desde 2001 cuando, arruinado y enfermo, se entregó voluntariamente a las autoridades británicas después de pasar 36 años prófugo, una treintena de ellos en la ciudad brasileña de Río de Janeiro.
Hasta ahora, todos sus intentos por salir de la cárcel habían resultado infructuosos, el último en julio pasado, cuando el mismo Jack Straw le denegó la libertad condicional alegando que no se había "arrepentido totalmente" de sus crímenes.
Ronald 'Ronnie' Biggs se hizo famoso cuando en la madrugada del 8 de agosto de 1963 junto a otros 14 cómplices, logró detener un tren postal cargado de dinero cambiando la señalización vial.
Tras herir a un empleado, los cacos se apoderaron de un botín de 2,6 millones de libras, que hoy representaría una suma enorme suma de dinero.
Detenido y condenado a 30 años de cárcel, Biggs su fugó en 1965 y tras un periplo por varios continentes, aterrizó en Brasil, donde a juzgar por su autobiografía, "The Odd Man Out", publicada en 1994, se dio la gran vida.
Finalmente, en 2001, solicitó voluntariamente a las autoridades británicas regresar a su Inglaterra natal e ingresó en la cárcel hasta hoy.
El cerebro de la operación, Bruce Reynolds, quien también huyó del país y luego estuvo 10 años recluido, declaró hoy a Sky News que "en los hechos (la liberación de Biggs) está en la línea de la mayoría de condenas cumplidas por el resto del equipo" que cometió el asalto del que este sábado se cumplen 46 años.