SANTIAGO.- En una reunión que sostuvo anoche con dirigentes cívicos y organizaciones de Potosí, el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, se comprometió a "congelar" hasta 2010 la firma de un acuerdo definitivo con Chile sobre las aguas del Silala.
Según informa el diario boliviano "Los Tiempos", García Linera adoptó la decisión para evitar que el tema se politice y para que se pueda dar un mayor debate sobre el preacuerdo establecido entre las comisiones de ambos países.
En la reunión realizada en el Palacio de Gobierno boliviano, los representantes de Potosí expresaron sus objeciones al preacuerdo y exigieron que sea enmendado.
En este sentido, se acordó realizar un nuevo encuentro del 3 al 7 de septiembre próximo, en el que se analizará el preacuerdo y se buscará mejorarlo.
"Vamos a rediscutir el acuerdo para agregar algunos puntos que podrían ser necesarios", explicó Francisco Quisbert, secretario ejecutivo de la Federación Regional Única de Trabajadores Campesinos del Altiplano Sur, respecto a la reunión que tendrá lugar en el cantón Quetena.
Ayer, dirigentes del Movimiento Sin Tierra de Bolivia quemaron una bandera chilena en la plaza de Armas de La Paz, en rechazo al proyecto de acuerdo sobre las aguas del Silala.
El preacuerdo se alcanzó a comienzos de julio y establece que las empresas chilenas que usan las aguas deben pagar a Bolivia por un 50% del consumo, hasta que estudios determinen si es un río internacional, como defiende Chile, o un manantial, como aseguran las autoridades bolivianas.
Sin embargo, el fin de semana pasado el Presidente boliviano, Evo Morales, descartó que exista un preacuerdo firmado entre los dos países y afirmó que la Cancillería de su país "está avanzando en el tema (...), es una propuesta que no es la definitiva".
La declaraciones del Mandatario fueron respondidas por el ministro de Obras Públicas chileno, Sergio Bitar, quien aseguró que "Chile conversó, negoció y acordó".