El canciller de Costa Rica, Bruno Stagno, junto al Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza.
AFPTEGUCIGALPA.- La misión de cancilleres y representantes de la Organización de Estados Americanos (OEA) insistió hoy en la firma del "Acuerdo de San José", que exige la restitución del depuesto Presidente Manuel Zelaya, tras concluir su segunda visita a Honduras sin haber logrado avance alguno.
El canciller costarricense, Bruno Stagno, leyó el comunicado emitido por la misión, que destaca la necesidad de continuar el diálogo entre las partes y exige el respeto a los derechos humanos, pero no recoge ningún avance de sus gestiones en la crisis política.
"La misión de la OEA está convencida de que el diálogo iniciado con participación directa de las partes puede conducir a la superación de la crisis política en que se encuentra envuelto el país a raíz de los sucesos del 28 de junio pasado", sostiene el texto.
Asimismo, la comisión pidió el "restablecimiento y permanencia de todas las garantías institucionales" como una condición básica para que exista el diálogo entre representantes de Zelaya y el gobernante de facto, Roberto Micheletti.
Los cancilleres también exigieron que se permita la "restitución de todos los medios de prensa, cuyo funcionamiento hubiera sido interrumpido", en referencia a radio Globo y canal 36, afines a Zelaya y clausurados el 28 de septiembre pasado.
El comunicado de la misión destaca que se "permita el normal acceso y consulta del Presidente Zelaya con sus representantes en la mesa de diálogo".
Los cancilleres reclaman la solución al "problema de la embajada de Brasil y que se le garanticen al Presidente Zelaya condiciones de vida y trabajo acordes con su alta dignidad".
El 28 de junio pasado comandos militares arrestaron a Zelaya y lo expulsaron a Costa Rica, desatando la crisis política hondureña.
La OEA calificó la acción como golpe de Estado, mientras los actores hondureños lo definieron como sucesión constitucional, ya que Micheletti fue designado como Presidente, tal como lo establece la Constitución Política.
Desde esa fecha la crisis se ha mantenido y los esfuerzos de la OEA por resolverla han chocado con los intereses de los grupos de Zelaya y de Micheletti.
La población de Honduras está convocada a elecciones generales el 29 de noviembre para escoger al nuevo Presidente, tres designados (vicepresidentes), renovar las 128 bancas del parlamento y los 298 alcaldes municipales.
La OEA amenaza con no reconocer al ganador de los comicios si Zelaya no es reinstalado en el poder antes de la celebración de los comicios.