GUATEMALA.-Un grupo de desconocidos mató el domingo al menos 29 personas —la mayoría decapitadas— en una finca de una región norteña de Guatemala que es asolada por narcotraficantes, informó el domingo la policía nacional.
Las autoridades dijeron el domingo que encontraron un sobreviviente herido de la matanza, que se quedó con vida fingiendo estar muerto. Sin embargo, los funcionarios no revelaron más detalles de lo que dijo.
La masacre fue cometida la madrugada del domingo en el poblado Caserío La Bomba en la provincia del Petén, cerca de la frontera con México, dijo el vocero de la Policía Nacional Civil, Donald González. Entre los muertos había dos niños y dos mujeres.
Esta es una de las peores masacres en Guatemala desde que terminó en 1996 la guerra civil de 36 años en el país.
González dijo que la policía investiga si el ataque tiene relación con el asesinato cometido el sábado de Haroldo León, hermano de Juan José León, alias “Juancho”, supuesto narcotraficante investigado por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, según sus siglas en inglés). Juan José fue asesinado en marzo del 2008 en un ataque en que también murieron otras 10 personas.
Juan José León fue atacado con armas de asalto y granadas por un grupo de aproximadamente 30 hombres, entre ellos varios mexicanos que las autoridades identificaron como presuntos miembros del cartel mexicano de las drogas Los Zetas. Este grupo ha ampliado sus operaciones de narcotráfico fuera de México, en ocasiones eliminando a la competencia.
La policía guatemalteca dijo que las víctimas de la matanza del domingo estaban atadas y los cadáveres mostraban señales de tortura. Al parecer trabajaban en la finca. La policía encontró en el lugar un mensaje escrito con sangre que decía “Salguero, venimos por ti”. La policía no dijo quién era Salguero.
Las autoridades dijeron policías y soldados comenzaron a peinar la zona el domingo en busca de los agresores. Por lo pronto, no mencionaron posibles motivos del ataque.
La fiscal general de Guatemala, Claudia Paz y Paz, se comprometió a esclarecer ese hecho “terrible” sin importar las consecuencias ni quién sea el autor de “esta masacre”.
“Es un hecho terrible que debemos clarificar e investgar sin importar las consecuencias, quien sea que haya sido el autor de esta masacre”, dijo Paz y Paz.
Guatemala se ha convertido en un punto importante para el envío de drogas hacia Estados Unidos.
En febrero, las autoridades de Guatemala levantaron el estado de sitio de dos meses que había declarado en la provincia de Alta Verapaz, que colinda con el Petén, tiempo en que enviaron fuerzas de seguridad para sofocar la violencia relacionada con las drogas.
El estado de sitio le concedió al ejército facultades de emergencia —como permiso para detener sospechosos sin orden judicial— y resultó en la detención de al menos 20 presuntos miembros de los Zetas.
Los Zetas son un grupo de ex soldados que comenzaron como sicarios del cartel mexicano del Golfo, hasta que se separaron y formaron su propio cartel. El grupo se volvió pronto una de las bandas más violentas en México y ha expandido su cruel violencia hacia Centroamérica. Han cobrado fama por la brutalidad de sus acciones, sobre todo por incursionar en la práctica ahora difundida de decapitar a adversarios y a miembros de las fuerzas del orden. Las autoridades los han vinculado con varias matanzas y fosas colectivas en el norte de México.