RABAT.- Varios miles de personas, entre ellos islamistas, se manifestaron el domingo en Casablanca y Rabat, atendiendo la convocatoria del Movimiento 20 de febrero, que reivindica cambios políticos y una mayor justicia social en Marruecos.
En Casablanca, en el barrio popular de Ulfa, más de 8.000 personas, corearon pacíficamente consignas hostiles a la clase política marroquí, reclamando "menos corrupción y una repartición equitativa de las riquezas". El Movimiento 20 de febrero, nacido tras las revueltas en el mundo árabe comienzos del año, agrupa, además de los islamistas de Justicia y Beneficencia, un importante movimiento ilegal, pero tolerado, así como "ciber-militantes" independientes y militantes de ultraizquierda.
"No a la acumulación de la fortuna y el poder", "La soberanía para el pueblo", "Queremos más igualdad", coreaban los manifestantes en Casablanca, vigilados por un importante dispositivo policial. En Rabat, la capital del reino, más de mil personas, entre ellos islamistas, se manifestaron en la plaza Bab El Had, en el centro.Varias decenas de contramanifestantes, enarbolando banderas y retratos del rey Mohamed VI, se manifestaron igualmente sin incidentes.
En Tánger, en el norte, también estaban previstas manifestaciones en horas de la noche, sobre todo en el barrio popular de Beni Makada. Estas manifestaciones se producen diez días después de un referéndum popular sobre una reforma constitucional propuesta por el rey y adoptada por más del 98% de los marroquíes.