Unas 5 mil personas coparon el centro cívico de La Paz para protestar contra el gobierno.
AFPLA PAZ.- El sindicato unitario más importante de Bolivia, la Central Obrera Boliviana (COB), salió este viernes por segundo día consecutivo a protestar en todo el país para exigir mejoras laborales al gobierno del Presidente Evo Morales y apoyar la marcha de nativos que caminan desde la Amazonía hasta La Paz para rechazar una carretera que atravesaría una reserva natural.
El líder de la COB, Pedro Montes, afirmó que "mientras el gobierno mienta a los trabajadores va a haber esta clase de conflictos. Si ellos (las autoridades) estuvieran verdaderamente preocupados por el hambre y miseria no habría necesidad de hacer marchas y huelgas", señaló.
"Los ministros no escuchan ni ven", agregó el líder obrero, que en el pasado apoyó la política del presidente Morales y luego demandó la "restructuración del gabinete de ministros para que atiendan a los trabajadores.
Unos 5.000 manifestantes colapsaron durante varias horas el centro urbano de la sede de gobierno en La Paz, donde se hallan las principales oficinas públicas y privadas, llegando hasta las cercanías de la Plaza de Armas, donde el Mandatario tiene su despacho. Por ello, la Policía redobló la seguridad, sin registrarse incidentes.
A la marcha asistieron sindicatos de trabajadores obreros, municipales, de salud, maestros y universitarios, todos encabezados por los dirigentes de la COB. La protesta fue convocada para expresar el apoyo a la marcha de los indígenas de la Amazonía y para demandar cumplimiento a compromisos salariales asumidos por el gobierno con los sindicatos.
La protesta estuvo matizada por una serie de consignas contra el gobierno y particularmente contra el presidente Morales, por la violenta intervención policial de la que fue objeto hace diez días la marcha de indígenas de la Amazonía, que se oponen a que una vía cruce su territorio (TIPNIS), en el centro del país.
"Evo decía que todo cambiaría, ¡mentira! ¡mentira! ¡la misma porquería!" y "Evo bellaco, el TIPNIS no es tu cato (propiedad)" coreaban a su paso por las calles los manifestantes, en una de las consignas más repetidas.
El gobierno de Morales afirmó que el impacto de la huelga es mínimo, pues sólo sectores como salud, educación y algunos sindicatos asistieron, mientras que el resto del aparato productivo, la banca privada y el comercio minorista funcionan con normalidad. El gobierno también anunció que otorgará un bono único de 1.000 bolivianos (unos 143 dólares) este año para unos 48.000 empleados públicos, los que no recibieron ningún incremento salarial durante esta gestión.