Obama quiere igualdad para todos.
AFP
WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó en su discurso sobre el Estado de la Unión que mantener la promesa de oportunidades económicas para todos es "la cuestión clave de nuestra época".
En extractos distribuidos por adelantado por la Casa Blanca, el presidente estadounidense, quien intervendrá ante ambas Cámaras del Congreso agregó que ofrecer oportunidades "no son valores democráticos o republicanos, sino estadounidenses".
Según Obama, quien esta noche presentará en su discurso los principios que guiarán su política económica si resulta reelegido, recuerda: "no hay que olvidarlo: millones de estadounidenses que trabajan duro y respetan las reglas merecen un Gobierno y un sistema financiero que hagan lo mismo".
"Es hora de aplicar las mismas reglas a los de arriba que a los de abajo: ni planes de rescate, ni dádivas, ni escapatorias. Un EE.UU. que vaya a durar insiste en que cada uno asuma sus responsabilidades", destaca el presidente estadounidense.
Obama apunta también que en el discurso presentará "un modelo para una economía que vaya a durar, una economía erigida en la manufactura estadounidense, la energía estadounidense, la capacitación de los trabajadores estadounidenses y una renovación de los valores estadounidenses".
En el cuarto año de un mandato caracterizado por los duros enfrentamientos entre demócratas y republicanos, el presidente asegura: "colaboraré con cualquiera en el Congreso para dar impulso (a estas ideas)".
"Combatiré la obstrucción con acciones y me opondré a cualquier intento de volver a las mismas políticas que nos llevaron a esa crisis económica en primer lugar", advierte también.
Para subrayar este mensaje, Obama ha querido dar un golpe de efecto populista y ha reclutado a la secretaria del multimillonario Warren Buffett, Debbie Bosanek, quien será una de las invitadas a presenciar la alocución desde el balcón de la primera dama, Michelle.
Buffett hizo famosa a su secretaria al defender el año pasado que los ricos pagaran más impuestos, al poner de relieve que las reglas fiscales en EE.UU. son tales que, proporcionalmente, su secretaria paga mucho más al erario público que él.
Esa propuesta ha pasado a conocerse como "la regla Buffett" y Obama, quien aboga por ponerla en práctica como una medida imprescindible para reequilibrar las cuentas públicas, presentará hoy en su discurso nuevos detalles sobre cómo conseguirlo, según apuntó su director de Comunicaciones, Dan Pfeiffer.
La cuestión ha cobrado nueva actualidad ante la polémica en torno a la declaración de impuestos del principal precandidato presidencial republicano Mitt Romney, quien hoy hizo públicas sus cuentas de los dos últimos ejercicios fiscales.
En estas cuentas, Romney aparece con unos ingresos anuales de 21 millones de dólares, procedentes de dividendos e inversiones, sin cobrar ningún salario. Dado que las ganancias de capital están tasadas en torno al 15 por ciento en EE.UU., el precandidato ha pagado una media del 14 por ciento en impuestos en los dos últimos ejercicios, 6,2 millones de dólares.
Los salarios, por contra, cuentan con una gravación más alta y pueden llegar hasta el 35 por ciento. Para asegurarse de que su mensaje no cae en saco roto, el presidente tiene previsto emprender tras su discurso una gira de tres días por cinco estados clave del país donde repetirá los principales elementos de su discurso.
Obama visitará Iowa, Arizona, Nevada, Colorado y Michigan, todos ellos estados donde se perfilan algunas de las batallas electorales más duras de cara a los comicios de noviembre.