Tropas sirias avanzan a bordo de un blindado en el poblado de Zabadani, cerca de la frontera con Líbano.
AP
NUEVA YORK.- La Asamblea General de la ONU aprobó hoy por amplia mayoría una resolución que condena "las sistemáticas violaciones de los derechos humanos" cometidas por el Gobierno de Siria y pide el inicio del plan de transición propuesto por la Liga Árabe.
Según el primer recuento de la votación, 137 países se pronunciaron a favor, 17 se abstuvieron y 12 votaron en contra. Entre ellos se contaron cinco naciones latinoamericanas: Venezuela, Cuba, Bolivia, Nicaragua y Ecuador -todos ellos con gobiernos de izquierda-.
A ellos se suman Rusia, China, Irán, Bielorrusia, Zimbabue, Corea del Norte y la misma Siria.
"El plan de la Liga Árabe es la única manera real de que el pueblo sirio puedan lograr sus legítimas aspiraciones de libertad y democracia", afirmó el embajador egipcio, Maged Abdelfattah Abdelaziz, al defender la resolución como representante de los países árabes en la Asamblea General.
El diplomático había exhortado al pleno de la Asamblea a aprobar la resolución "para mostrar que la comunidad internacional habla con una sola voz ante la gravedad de los acontecimientos que se viven en Siria y dar apoyo pleno a los esfuerzos de la Liga Árabe", aseveró.
Rusia y China, que en la última votación referente a Siria en la Asamblea General se habían abstenido, votaron hoy en contra del texto árabe, que condena contundentemente los ataques perpetrados contra la población siria y respalda "completamente" el plan de transición preparado por la Liga Árabe.
Rusia amenazó con someter a votación también las enmiendas que había propuesto al texto para poder votar a favor y que estaban dirigidas a calibrar por igual la violencia desplegada por el régimen sirio con la de los manifestantes que piden reformas democráticas en el país, pero finalmente no dio ese paso.
Esas modificaciones eran similares a las que Rusia ya trató de incluir sin éxito en la resolución que el Consejo de Seguridad quería aprobar el pasado 4 de febrero como respaldo al plan de transición de la Liga Árabe para Siria y que Rusia y China finalmente vetaron.
Desapariciones y violencia sexual
La resolución aprobada por la Asamblea General, órgano consultivo de la ONU donde no existe el poder de veto, condena concretamente "las violaciones continuas y sistemáticas de los derechos humanos y las libertades fundamentales por parte de las autoridades sirias, así como "el uso de la fuerza contra civiles, las ejecuciones arbitrarias, el asesinato y la persecución" de personas.
También menciona "la detención arbitraria, las desapariciones forzosas, la obstaculización del acceso a tratamiento médico, la tortura, la violencia sexual y los maltrato, incluso contra los niños".
"El texto exhorta al Gobierno de Siria a que ponga fin inmediatamente "a todas las violaciones de los derechos humanos y a los ataques contra civiles, proteja a su población, cumpla cabalmente sus obligaciones derivadas del derecho internacional".
También condena "todos los actos de violencia, independientemente de quién los haya cometido", y exhorta "a todas las partes, incluidos los grupos armados, a que pongan fin a todos los actos de violencia o represalias de forma inmediata, de conformidad con la iniciativa de la Liga Árabe".
En ese sentido, exige al Gobierno de Al Asad que cumpla con el plan de acción propuesto por la Liga Árabe, por el que le pide "sin dilación" a que ponga fin "a todos los actos de violencia y proteja a su población".
Igualmente pide la resolución que Siria libere "a todas las personas detenidas arbitrariamente a consecuencia de los incidentes ocurridos recientemente".
El texto invita además al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, a designar a un enviado especial para Siria que ayude a promover una solución pacífica a la crisis.