LONDRES.- Los principales edificios y monumentos de las grandes ciudades del Reino Unido apagaron sus luces a las 20.30 hora local para sumarse a la llamada Hora del Planeta.
En Londres, el palacio de Buckingham, el reloj Big Ben, la catedral de San Pablo, así como el castillo escocés de Edimburgo, entre otros, permanecieron apagados durante una hora como parte del evento internacional destinado a denunciar el cambio climático.
En el caso de Escocia, en esta ocasión la iniciativa extendió con el apagón de más edificios, como la National Gallery, el Museo de Glasgow, el Museo Kelvingrove, los castillos de Urquhart, Inverness y Eilean Donan, y otros muchos más.
Este evento internacional está promocionado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), cuyo director en Escocia, Richard Dixon, dijo hoy a la prensa que los escoceses están “muy orgullosos” de sumarse cada vez más a la iniciativa del WWF. "Desde líderes políticos, estudiosos, autoridades locales y lugares emblemáticos, es grandioso ver a tanta gente detrás de este evento global", agregó Dixon.
"La Hora del Planeta del WWF tiene una capacidad única de unir y darle poder a la gente en todo el mundo", dijo y añadió que se era un acto de "increíble poder global" que deja ver el impacto que el cambio climático tiene en la gente y la naturaleza.
Además de edificios emblemáticos, escuelas, hogares y empresas del Reino Unido también se sumaron al apagón voluntario de luces y cualquier otro aparato eléctrico como manera de llamar la atención sobre las consecuencias del cambio climático.