PARÍS.- La dirigente del Frente Nacional (extrema derecha), Marine Le Pen, declaró el martes que votará en blanco en la elección presidencial francesa del 6 de mayo, que opondrá el presidente Nicolas Sarkozy al socialista François Hollande, y dio cita a sus partidarios en las legislativas de junio, "la tercera vuelta".
Marine Le Pen, que quedó tercera posición en la primera vuelta con cerca de 18% de los votos, dijo que votará en blanco: no lo hará por Sarkozy, que sería una "nueva decepción", ni por Hollande, que sería una "falsa esperanza", en un discurso pronunciado al término de la tradicional manifestación del Frente Nacional en honor de Juana de Arco.
"No otorgaré mi confianza ni mandato a esos dos candidatos", "el domingo votaré en blanco", dijo.
Pese a una argumentación en favor del voto en blanco, que desarrolló durante todo su discurso poniendo en paralelo a los dos candidatos de la segunda vuelta, Le Pen no dio explícitamente consigna de voto: "Cada cual hará su elección. Yo haré la mía. Sois ciudadanos libres y votaréis según vuestra conciencia, libremente", dijo.
Celebrando su resultado en la primera vuelta, Le Pen se jactó de haber "impuesto los verdaderos temas en los debates". "La campaña electoral se estructura alrededor de nuestras propuestas", dijo.
"La elección no es para esta vez, pero hemos sentado las bases para nuestra llegada al poder. Nuestra victoria es ineluctable", dijo, dando una próxima cita a sus partidarios en las presidenciales de junio próximo, calificadas de "tercera vuelta".
Respecto a los dos candidatos, afirmó que "no hay presidencial" sino "un concurso de reclutamiento para contratar un director de operaciones del BCE, bajo tutela del FMI" y que debe "rendir cuentas regularmente a Angela Merkel", la canciller alemana.
Varios miles de personas participaron en la manifestación, que desembocó en la plaza de la Ópera, donde la dirigente pronunció su discurso.
Los manifestantes enarbolaban banderas de Francia y repetían consignas como "Sarko-Hollande es lo mismo", "ni derecha, ni izquierda, azul marina", "estamos en nuestro país" o "Francia para los franceses".
Aunque no lo reconoce públicamente, Marine Le Pen apuesta por una victoria de François Hollande el 6 de mayo a fin de reivindicar su condición de principal opositora a la izquierda.
Una vez más, se presentó el martes como "la única oposición a la izquierda".
"Somos ahora la única y verdadera oposición a la izquierda ultraliberal, laxista y libertaria", había dicho ya no bien se conocieron los resultados de la primera vuelta, en la que 6,4 millones de franceses votaron por ella.
La semana pasada, la presidenta del FN pidió varias veces a Nicolas Sarkozy y al líder de su partido presidencial, la Unión por un Movimiento Popular (UMP), Jean-François Copé, que dijera claramente por quién votarían en caso de duelo FN-Partido Socialista en las legislativas de junio próximo. Ninguno de los dos se pronunció por el Frente Nacional, lo que ella no dejó de recordar en su discurso.