EL CAIRO.- Los islamistas de Egipto se atribuyeron una victoria estrecha el domingo en el conteo de votos de la elección presidencial, pero los generales que dirigen el país desde el derrocamiento de Hosni Mubarak emitieron nuevas normas que dejan claro que el poder real siguen estando en manos de los militares.
Un decreto del consejo militar de Gobierno sólo le otorga poderes limitados al nuevo jefe de Estado. Además, le adjudica a la cúpula militar que dirige al país las prerrogativas legislativas que estaban en manos del Parlamento dirigido por los islamistas que el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas (SCAF por sus siglas en inglés) disolvió la semana pasada.
Los opositores liberales e islamistas denunciaron un "golpe militar".
Los Hermanos Musulmanes prometieron rechazar las medidas y dijeron que Mohamed Morsy, su candidato para la presidencia, superó al ex general Ahmed Shafik, ex primer ministro de Mubarak, por un 52 por ciento de los votos con un 82 por ciento de los centro de votación escrutados.
Un dirigente de los Hermanos Musulmanes dijo que Morsy tenía 10,5 millones de votos de un total de unos 20 millones de votos escrutados hasta el momento, según el recuento de aproximadamente 10.700 centros de votación de un total cercano a los 13.100. Shafik tenía 9,5 millones de votos o un 48 por ciento, agregó el funcionario.
No había un conteo oficial. Los asesores de Shafik se mostraron cautos, pero uno de sus simpatizantes dijo que Morsy llevaba la delantera, aunque no por mucho.
Podría surgir un resultado preliminar en las primeras horas del lunes.
Muchos opinaron que la "declaración constitucional" del consejo, emitida bajo las facultades que éste se adjudicó tras hacer a un lado a Mubarak -para poder calmar las protestas callejeras- fueron un golpe contra la democracia.
Los ciudadanos han puesto sus quejas en las redes sociales, uno de los medios favoritos dentro de la Primavera DArabe que puso fin a 30 años de Gobierno de Mubarak.
"Grave revés para la democracia y la revolución", publicó en la red social Twitter Mohamed ElBaradei, ex diplomático de Naciones Unidas y premio Nobel de la Paz.
"SCAF retiene el poder legislativo, despoja al presidente de cualquier autoridad sobre el ejército y solidifica su control", dijo.
"La 'declaración inconstitucional' mantiene un descarado golpe militar", escribió en Twitter Abdel Moneim Abol Fotouh, un islamista moderado que fue derrotado en la primera ronda de la elección presidencial el mes pasado. "Tenemos la obligación de confrontarlo", afirmó.