DAMASCO/MOSCÚ.- El presidente sirio, Bashar al Assad, y el enviado especial de la ONU, Kofi Annan, acordaron hoy en Damasco nuevas acciones para solucionar el conflicto en Siria.
"Hemos acordado un planteamiento que yo transmitiré a la oposición siria", dijo el enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, que no quiso dar por ahora más detalles. Lo importante -añadió- es un diálogo político que Assad pueda aceptar.
El encuentro con Al Assad fue "abierto y constructivo". "Dejo Siria, pero continuaremos con el diálogo", dijo Annan antes de seguir viaje a Teherán para mantener conversaciones sobre el conflicto en Siria con el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, y el ministro de Relaciones Exteriores, Ali Akbar Salehi.
El gobierno iraní es uno de los principales aliados de Damasco. Observadores estiman que, con su visita, Annan trata de involucrar a Irán en los esfuerzos para alcanzar la paz en Siria, azotada por las luchas entre el régimen de Al Assad y los activistas opositores y desertores del Ejército.
"Animo a los gobiernos y a otras instancias a realizar esfuerzos similares", recalcó Annan, quien había llegado a la capital siria el domingo.
En una entrevista publicada el fin de semana con el periódico francés "Le Monde", el ex secretario general de las Naciones Unidas reconoció que su plan de seis puntos de paz hasta ahora había sido infructuoso.
En tanto, el Consejo Nacional Sirio (CNS) criticó el encuentro. "Annan decidió reunirse con un símbolo del régimen sirio", citó la emisora Al Arabiya un comunicado. El CNS también cuestionó los intentos de Annan de involucrar a Irán para una solución del conflicto. Con el apoyo al régimen en Damasco el gobierno en Teherán se hace cómplice.
Antes del encuentro se registraron enfrentamientos en Damasco entre las tropas del gobierno y los rebeldes. Los residentes en la capital informaron de disparos y explosiones cerca de la céntrica plaza de los Abasidas.
"Las fuertes explosiones hicieron retumbar nuestra casa y los niños se asustaron", dijo un residente, que quiso mantener el anonimato.
En conversaciones celebradas en Moscú con el gobierno ruso, representantes de la oposición siria rechazaron nuevamente dialogar con el presidente Assad. Activistas opositores citados por la agencia de noticias Itar-Tass afirmaron que la renuncia de Assad es una condición para que avance el proceso político en el país.
En una reunión con el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, la delegación opositora propuso al general desertor Manaf Tlass como sucedor de Assad.
Por su parte, el presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió hoy de nuevo a Occidente en contra de una intervención militar en Siria.
En lugar de derrocar a Assad con una "democracia de cohetes y bombas", se tendría que instar a las partes en conflicto en el país árabe a negociar y alcanzar una solución política pacífica, dijo Putin ante embajadores rusos en Moscú.
Según la agencia de noticias rusa Interfax, el jefe del Kremlin afirmó que sólo así se podrá llegar a un acuerdo a largo plazo.
Putin acusó a Occidente de infringir leyes internacionales bajo la tapadera de supuestas "operaciones humanitarias".