SYDNEY.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó hoy de la "catástrofe sanitaria" que puede causar una cepa de la malaria resistente a los fármacos detectada en el sudeste de Asia si llega a otras zonas del mundo.
"Si se extiende fuera de sus límites y llega a África, realmente podría convertirse en una catástrofe sanitaria pública", dijo el director del Programa sobre Malaria de la OMS, Robert Newman, en Sídney (Australia).
La cepa de la malaria o paludismo en cuestión aumentó su resistencia a los tratamientos de artemisinina en la región del Gran Mekong, que incluye áreas de Camboya, Tailandia, Myanmar, Laos y Vietnam.
Por el momento, los medicamentos contra la malaria utilizados en África siguen siendo efectivos, pero si esa cepa alcanza ese continente, podrían perder su eficacia a medio y corto plazo, según expertos presentes en la conferencia "Malaria 2012: Salvando vidas en Asia Pacífico", que se celebra en la ciudad australiana.
La conferencia, en la que participan de diez ministros de Sanidad de países de la región, destacados funcionarios, científicos y otros expertos en medicina tropical, concluirá el próximo viernes con una reunión ministerial encabezada por el enviado especial de la ONU para la Malaria, Ray Chambers.
En todo el mundo se registran anualmente más de 216 millones de casos de malaria, que se transmite a los humanos mediante la picadura de mosquitos anofeles infectados, y de este total, 655.000 son mortales, de acuerdo a datos facilitados por la OMS.
Unos 30 millones de casos de malaria se contabilizan cada año en la región de Asia-Pacífico, donde la enfermedad es endémica en 22 países y causó la muerte a unas 42.000 personas en 2010, la mayoría de ellas en India, Myanmar, Bangladesh, Indonesia y Papúa Nueva Guinea.