PARIS.- Proveedores franceses asociados a la marca Findus se querellarán contra proveedores rumanos por encontrar en sus alimentos envasados carne de caballo en lugar del vacuno anunciado en las etiquetas de los platos preparados para Findus.
El presidente de la marca de proveedores Spanghero, Barthélémy Aguerre, anunció que, "Si nos han engañado, ha sido el proveedor rumano, porque nosotros no hemos comprado carne de caballo, sino carne de vacuno y entregamos carne de vacuno", en declaraciones a la emisora de radio "France Info".
Spanghero había sido designado como el origen del engaño sobre el tipo de carne de tres preparados de Findus por Comigel, una empresa cárnica también francesa con sede en Metz, a la que el grupo de congelados había señalado cuando se hizo público el escándalo en el Reino Unido.
Por su parte, el ministro británico de Medio Ambiente, Owen Paterson, convocó hoy a representantes de cadenas comerciales en el Reino Unido para tratar sobre la carne de caballo encontrada en platos preparados, al tiempo que el supermercado Aldi confirmó que sus productos también se han visto afectados.
La cadena de supermercados británica Aldi confirmó anoche que ha encontrado entre un 30 y un 100 % de carne de caballo en dos de sus platos de lasaña y boloñesa, y expresó su "decepción" con el suministrador francés, Comigel, asociado también con Findus.
El responsable de Spanghero, un grupo cárnico con sede en la ciudad de Castelnaudary, en el sur de Francia, que factura 65 millones de euros anuales y oficialmente trata 9.600 toneladas de carne y 10.400 toneladas de platos cocinados, insistió en que no trabajan con caballo.
Los servicios antifraude franceses anunciaron ayer la apertura de una investigación y el ministro de Agricultura, Stéphane Le Foll, consideró que "no es aceptable" el "engaño" sobre la composición de los platos de Findus y aseguró que se aplicarán "las sanciones necesarias".