CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Francisco y la Presidenta de Argentina, Cristina Fernández, mantuvieron un encuentro a solas que se prolongó unos 20 minutos, según informó el portavoz vaticano, Federico Lombardi.
Tras la reunión, el Pontífice y la Mandataria argentina almorzaron en la residencia Santa Marta, donde se aloja Francisco en estos días hasta que esté preparado el apartamento papal en el palacio apostólico.
Tras el encuentro a solas, el Santo Padre saludó al séquito que acompañaba a la Mandataria argentina, quien le regaló u mate al ex obispo de Buenos Aires.
Cristina Fernández fue la primera jefa de Estado recibida por el Papa Francisco.
Según el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, se considera el encuentro como un "gesto de cortesía y afecto" hacia la jefa de Estado y al pueblo argentino, de donde procede el Papa.
El portavoz subrayó que no se trata de una visita formal o de Estado, sino un gesto de cortesía, de cariño hacia su tierra argentina.
La relación entre el Pontífice, hasta ahora arzobispo de Buenos Aires, y los Kirchner ha sido bastante tensa en los últimos años, sobre todo tras la aprobación de las leyes sobre el aborto y el matrimonio homosexual.
La última audiencia en privado entre Fernández de Kirchner y Bergoglio tuvo lugar en 2010.
Cristina Fernández asistirá mañana, 19 de marzo, a la misa de inicio del Pontificado, a la que se espera acudan 150 delegaciones de países.
La delegación argentina que acudirá a la misa estará compuesta por el ministro de Relaciones Exteriores, Héctor Timerman; el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti; el titular de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez y el diputado radical Ricardo Alfonsín, además de representantes de la Conferencia Episcopal Argentina y representantes de varios partidos políticos argentinos.
Fernández llegó ayer a Roma poco antes de las 16:00 hora local (12:00 hora en Chile) a la zona militar del aeropuerto de Ciampino.