MONTEVIDEO.- La Corte Electoral de Uruguay validó este viernes las 52.343 firmas necesarias para iniciar el largo proceso que lleve a un referéndum para la derogación de la ley que despenaliza el aborto en el país aprobada a finales de 2012.
La instancia recibió el pasado 21 de marzo más de 68.000 firmas recogidas por grupos que impulsan la realización de un referéndum sobre la controvertida norma, si bien detuvo la validación una vez que se superó la cifra necesaria de 52.343 adhesiones correspondientes al 2% del padrón electoral.
Según explicó el vicepresidente del organismo, Wilfredo Penco, la principal autoridad electoral del país validará ahora formalmente el resultado y estudiará el informe legal que exige la normativa, lo que ocurrirá con toda previsión a lo largo de la próxima semana, antes de convocar a un "acto de adhesión", el segundo paso en el proceso de derogación.
Este "acto de adhesión", que se producirá en un plazo de 45 días una vez que la Corte formalice la validación de la recogida de firmas, requiere que un 25% del padrón, aproximadamente 654.000 personas, acuda a las urnas en una convocatoria que no es obligatoria y se pronuncie sobre su deseo o no de realizar un referéndum sobre el tema.
Sólo si se consigue ese número de votos afirmativos se procederá a realizar la convocatoria a un referéndum para eliminar el aborto, que se produciría en un plazo de cuatro meses y en el que todos los ciudadanos uruguayos con derecho a voto estarán obligados a pronunciarse sobre si se deroga o no la norma.
La nueva legislación del aborto en el país, que fue aprobada con escasa mayoría en ambas cámaras del Parlamento entre una gran controversia, despenaliza el aborto hasta la semana 12 de gestación siempre que se sigan ciertos procedimientos regulados por el Estado.
Así, las uruguayas y las extranjeras con al menos un año de residencia en el país pueden solicitar la interrupción del embarazo de forma libre.
Previamente, la paciente debe pasar por una comisión formada por un ginecólogo, un psicólogo y un asistente social que le asesoran sobre los riesgos de practicarse un aborto e incluso sobre la posibilidad de culminar su embarazo y dar al niño en adopción.
Después tiene cinco días para reflexionar y si luego ratifica su voluntad se le practica el aborto, farmacológico y siguiendo los criterios recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En enero pasado, primer mes de aplicación efectiva de la ley, se realizaron unos doscientos abortos en Uruguay.