PRETORIA.- El Presidente Estadounidense, Barack Obama, manifestó este domingo su preocupación por la violencia en Egipto, y llamó a las autoridades de ese país a garantizar la seguridad de la embajada y el consulado estadounidenses.
Desde Pretoria, Sudáfrica el Mandatario pidió a las fuerzas de seguridad ejercer contención a los manifestantes y abstenerse del uso de la violencia.
Tras reunirse con el Presidente sudafricano, Jacob Zuma, Obrama declaró "apoyamos las protestas y los métodos pacíficos de lograr cambios en el país", no obstante, se negó a tomar parte en el conflicto agregando que "el pueblo egipcio debe hallar su camino".
Durante las protestas contra el Presidente egipcio, Mohamed Mursi, murieron al menos tres personas este viernes, entre ellas un ciudadano estadounidense, y más de cien resultaron heridas.
Según las fuerzas de seguridad un hombre lo apuñaló con un gran cuchillo en el pecho cuando hacía fotos a los manifestantes. El diario "The New York Times" informó este sábado en su edición online que se trataba de un estudiante de 21 años de Ohio que enseñaba inglés a niños egipcios como becario de la organización Amideast a la vez que mejoraba su árabe.
El Departamento de Estado norteamericano recomendó a sus ciudadanos no viajar a Egipto, si no es estrictamente necesario y también lo hizo el Ministerio de Exteriores alemán.
Numerosos extranjeros salieron del país, informaron fuentes aeroportuarias. Los empleados y familiares del embajador estadounidense, en total 45 personas, abandonaron hoy el país y todos los vuelos con destino a Estados Unidos, Europa y los países del Golfo estaban llenos, dijeron fuentes del aeropuerto de El Cairo.
Mañana domingo, cuando se cumple el primer aniversario de Mursi en el cargo, un movimiento opositor va a entregar 20 millones de firmas para exigir su renuncia y la celebración de nuevos elecciones, por lo que se teme una nueva escalada de las tensiones.