WASHINGTON.- El senador demócrata Robert Menéndez, presidente del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta, y su colega republicano Lindsey Graham consideraron hoy la concesión de asilo temporal por parte de Rusia al ex analista de la CIA Edward Snowden como un "revés" para las relaciones entre este país y EE.UU.
"Independientemente del hecho que Rusia esté otorgándole asilo por un año, esta acción es un revés para las relaciones entre los Estados Unidos y Rusia", indicó el senador demócrata a través de un comunicado, en el que recordó que Snowden "es un fugitivo que pertenece a un tribunal de Estados Unidos", y no "un hombre libre merecedor de asilo en Rusia".
El ex analista de los servicios secretos estadounidenses, reclamado por la Justicia de ese país por revelar una trama de espionaje masivo de las comunicaciones por parte de los servicios secretos, abandonó hoy el aeropuerto de Sheremetievo de Moscú, donde había pasado las últimas cinco semanas, después de recibir el asilo temporal por un año en Rusia.
"Edward Snowden tiene el potencial de dañar gravemente los intereses de seguridad nacional de EE.UU., y la información que ha estado revelando podría ayudar a terroristas y a otras personas de todo el mundo que desean hacerle un verdadero daño a nuestro país", explicó Menéndez.
Por ello, el senador demócrata exigió que Rusia "devuelva" a Snowden para que sea juzgado en EE.UU..
Por su parte, el senador republicano Lindsey Graham calificó la acción del Gobierno ruso de "provocativa" y aseguró que es un "signo de la evidente falta de respeto" del presidente ruso, Vladímir Putin, hacia el presidente de EE.UU., Barack Obama.
Aunque el abogado del ex analista de la CIA, Anatoli Kucherena, confirmó que Snowden ya ha abandonado el aeropuerto moscovita, éste no precisó a dónde se ha dirigido ahora, y se limitó a indicar que se encuentra "en un lugar seguro".
El ex técnico de la CIA llegó al aeropuerto de Sheremetievo el pasado 23 de junio en un vuelo procedente de Hong Kong, desde donde huyó después de que EE.UU. solicitara su extradición a las autoridades chinas.
Putin descartó la extradición de Snowden a petición de Washington, pero condicionó la concesión de asilo temporal a Snowden a que éste pusiera fin a toda actividad que perjudique los intereses de Estados Unidos.