Doce inmigrantes desaparecen cuando eran remolcados a un puerto de Grecia

ATENAS.- Doce inmigrantes desaparecieron en aguas del mar Egeo tras volcar la embarcación en la que viajaban cuando era remolcada a un puerto griego por la Guardia Costera.

La embarcación, un bote de pesca con 28 personas, había sido detectada por los guardacostas griegos a 1,5 kilómetros de la costa del islote Farmakonisi, situado a 10 kilómetros de la bahía turca.

Según informó una portavoz de la Guardia Costera, la barca era remolcada al puerto de Leros cuando "por razones aún desconocidas" dos personas cayeron al agua.

Entonces, según la misma fuente, los ocupantes se escoraron todos hacia un lado para ver lo que había sucedido, provocando que la barca volcase.

Los guardacostas lograron rescatar a 16 inmigrantes, pero 12 aún continúan desaparecidos.

Ayer, la Guardia Costera detuvo a 34 inmigrantes que navegaban en una barca de pesca robada, aparentemente tratando de escapar de Grecia hacia Italia.

En noviembre, 12 inmigrantes, cuatro de ellos niños, murieron cerca de la isla de Lefkada, también en la costa occidental de Grecia, al volcar la embarcación en la que navegaban 27 indocumentados tratando de huir hacia Italia.

Además, este sábado se encontró el cadáver de un inmigrante de entre 25 y 35 años en la zona del río Evros, junto a la frontera con Turquía.

A finales de 2012, Grecia, que se ha convertido en el principal país de acceso a territorio de la Unión Europea (UE) para los inmigrantes de África y Asia, levantó una valla en la parte de frontera terrestre que comparte con Turquía.

Este hecho, ha provocado un cambio en las rutas migratorias, pues ahora se utiliza más la vía marítima entre la costa occidental de Turquía y las islas griegas del Mar Egeo.

Por otro lado, dada la mala situación de los inmigrantes en Grecia -sometidos a ataques racistas, maltratos policiales y a la falta de trabajo en un país en crisis, según denuncian los informes de las organizaciones de derechos humanos- muchos tratan de continuar su ruta hacia el centro y norte de Europa atravesando los Balcanes o, por mar, hacia Italia.

En los últimos años se incrementó la seguridad en los barcos que parten con destino a Italia de los puertos de Patras, Igumenitsa y Corinto, en los que anteriormente los inmigrantes sin papeles trataban de introducirse como polizones.

Por ello, también han aumentado los intentos de cruzar los 300 kilómetros que separan Grecia de Italia en pequeñas embarcaciones, algunas de ellas robadas.