Ex preso de Guantánamo pidió a Argentina que reciba a otros detenidos

BUENOS AIRES.- Yihad Ahmad Diyab, uno de los presos que permaneció durante años encerrado en la cárcel estadounidense de Guantánamo y que fue recibido como refugiado en Uruguay, pidió a la Presidenta de Argentina, Cristina Fernández, que reciba en ese país a otros reclusos de ese centro de detención.

"Nunca voy a olvidar a los compañeros que están allá. Por eso es que vine aquí para luchar", señaló el ciudadano sirio.

"Hago una demanda al gobierno argentino, si puede recibir acá en forma humanitaria a presos de Guantánamo", aseveró.

El ex prisionero, quien tiene 43 años de edad, viajó el domingo desde Uruguay a Argentina acompañado por una periodista uruguaya, activista de derechos humanos y defensora de la causa palestina.

Diyab insistió en que él y sus compañeros no tienen que ver con las acusaciones de terrorismo lanzadas en su contra por las autoridades de EE.UU.

"Todo el mundo sabe que somos inocentes, víctimas de la política agresiva estadounidense", aseguró el ciudadano sirio, en una entrevista con medios alternativos como Barricada TV, Resumen Latinoamericano, Radio Gráfica y Radio Madre -esta última perteneciente a las Madres de Plaza de Mayo-.

"Fuimos torturados desde el primer momento"

El ex detenido denunció que sufrió torturas durante su permanencia en el presidio, ubicado en la célebre base militar estadounidense ubicada al este de la isla de Cuba.

"Fuimos torturados desde el primer momento hasta el último momento que salimos del campo", relató Diyab, quien en 2005 se declaró en huelga de hambre durante su reclusión.

"Antes de salir de Guantánamo estaba en un lugar donde tenía la comida forzada, un tubo que pasaba por la nariz para forzarme a comer. Ahí hablé con un compañero de Yemen que me dijo: 'Cuando salgas no nos olvides'. Y bueno, yo me emocioné mucho", contó el ex prisionero durante el reportaje, en el que se lo ve con el traje naranja que usaba en Guantánamo.

Tanto él como otros cinco presos recibieron asilo en Uruguay en diciembre pasado, tras una decisión adoptada por el Gobierno del Presidente José Mujica.