BEIJING.- China ha prohibido durante un año importar marfil esculpido en respuesta a las críticas internacionales que señalan la demanda creciente del mercado chino como la causante de la matanza de elefantes, amenazados con la extinción en una generación.
La decisión, que entró en vigor el jueves, fue anunciada en un comunicado subido a la página de Internet oficial de la Administración de Bosques.
Se produce en víspera de la visita a China del príncipe Guillermo, duque de Cambridge, que lleva a cabo una campaña contra el contrabando internacional causante de la matanza de animales salvajes, un asunto que abordará en una conferencia en la provincia de Yunnan (sur), el miércoles próximo.
China ha firmado la Convención para la Protección de Especies en Peligro, pero las ventas de marfil trabajado son legales. El consumo de marfil de contrabando ha crecido en los últimos años.
La escultura en marfil es un arte antiguo en China y estos objetos delicadamente trabajados -a menudo escenas de la tradición budista, pero también palillos tradicionales- son muy apreciados por los coleccionistas que ven en ellos una inversión rentable.
Entre 800 y 900 casos de contrabando de marfil se descubren anualmente en China, según las estadísticas de las aduanas, citadas por el Diario de la Juventud. Y más de la mitad del comercio legal de marfil es objeto de transacciones ilegales.
En diciembre último, un informe conjunto de la ONG medioambiental Save the Elephants y de la Fundación Aspinall estimaba que más de 100.000 elefantes han sido abatidos entre 2010 et 2012, debido, principalmente, al comercio de marfil en China que está "fuera de control".
Pekín ya ha cerrado al menos 10 talleres de marfil legalmente registrados y ha metido en la cárcel a centenares de traficantes, pero estas medidas no son suficientes, según el informe.
El precio del marfil en China ha pasado de los 550 euros el kilo que valía en 2010 a 1.540 euros en 2014, según los investigadores.
La prohibición de un año decretada para el marfil esculpido "está destinada a medir los efectos", según la agencia oficial Xinhua.