CARACAS.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció el sábado una serie de medidas para limitar la presencia de funcionarios estadounidenses en territorio venezolano y la adopción de un sistema de visado obligatorio para ejercer mayor control sobre los ciudadanos de Estados Unidos en el país sudamericano.
El mandatario anunció que se les negará el ingreso a los ciudadanos de EE.UU. acusados de "terroristas" que soliciten visa, entre ellos el ex presidente George W. Bush.
"Para proteger a nuestro país (...) he decidido implantar un sistema de visado obligatorio para todo estadounidense que ingresa a Venezuela", dijo el mandatario en un discurso público durante una manifestación de simpatizantes chavistas.
"Un conjunto de jefes políticos de Estados Unidos que han violado los derechos humanos bombardeando" a países como Siria, Irak o Afganistán "no podrán ingresar a Venezuela por terroristas", indicó.
La decisión para no otorgar visas afecta también al ex vicepresidente Dick Cheney, el ex jefe de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) George Tenet y los legisladores Robert Meléndez, Marco Rubio e Ileana Ros-Lehtinen.
El mandatario acusó además a Estados Unidos de interferir en los asuntos internos de Venezuela y promover un golpe de Estado en su contra.
Entre otras medidas adoptadas por su gobierno, destaca la orden para que se "proceda de inmediato notificar a todos los funcionarios (de la Embajada estadounidense en Caracas) que deben regirse" por leyes internacionales y locales que contemplen que toda "reunión que vayan a hacer en Venezuela debe ser notificada y autorizada previamente por el gobierno de Venezuela".
Washington ha calificado como cómicas tales acusaciones y considera "deplorable" que el gobernante venezolano acuse reiteradamente de conspiración a Estados Unidos para desviar la atención de los problemas que lo aquejan.