AFP
BALTIMORE.- Un gran número de manifestantes marcharon en una ciudad de Baltimore en calma este miércoles tras pasar la primera noche de toque de queda, medida decretada tras los disturbios derivados de incidentes ocurridos en los últimos días en reacción a la violencia policial contra la comunidad negra.
Manifestantes blancos y negros, marcharon "sin problemas", dijo la policía de Baltimore en su cuenta de Twitter, y agregó que "heridos durante la manifestación de hoy.", aunque si luego se confirmó que hubo 35 detenidos.
"De esas 35 detenciones, 34 fueron de adultos y una de un menor", indicó Eric Kowalczyk, portavoz de la Policía, durante una conferencia de prensa, al tiempo que se indicó que la noche del martes 15 agentes fueron heridos.
"Sin justicia no hay paz", coreaban los manifestantes, entre ellos estudiantes y escolares, y cantaban: "Hay que enviar a estos policías asesinos a la cárcel, todo el maldito sistema es culpable". En una de las muchas pancartas exhibidas se decía: "Policías asesinos merecen la cárcel". También hubo protestas en Nueva York y Boston.
El toque de queda, que entró en vigor el martes a las 22:00 horas locales (una más en Chile), se mantendrá todas las noches por una semana en esta ciudad portuaria de 620.000 habitantes en la costa este de Estados Unidos.
Hubo 27 personas arrestadas la noche del martes, según la policía, varias por violar el toque de queda. Otros manifestantes que desafiaron la medida fueron dispersados con bombas de humo y gas pimienta.
Según estimaciones de la televisión local también se registró un incendio frente a una biblioteca.
Minutos antes del inicio del toque de queda, la policía patrulló las calles portando megáfonos y hasta un helicóptero sobrevoló esta ciudad ubicada a 60 kilómetros de Washington para prevenir nuevos disturbios.
Se advirtió que arrestarán a toda persona que se encuentre en la calle durante el toque de queda, a excepción de quienes se movilicen por razones médicas o profesionales.
Tropas de la Guardia Nacional fueron desplegadas para apoyar a la policía. Pero nada se compara a los disturbios que comenzaron el lunes y dejaron más de 140 vehículos incendiados, 20 policías heridos, 250 sospechosos arrestados y cientos de comercios saqueados, tras el funeral de Freddie Gray, un hombre negro de 25 años que murió por severas lesiones en la columna vertebral och días después de haber sido detenido por la policía.