MÉXICO.- El cártel Los Cuinis y la organización criminal Jalisco Nueva Generación, que recientemente acaparó la atención en México tras aparatosos ataques contra las fuerzas federales, reciben adiestramiento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), asegura el semanario Proceso en su publicación de este domingo.
Citando fuentes anónimas de las agencias de Inteligencia de Estados Unidos, la revista mexicana asegura que estos dos grupos tienen sicarios entrenados por la guerrilla colombiana, específicamente para contrarrestar los embates militares.
Desde hace varios meses, "los informes que obtuvimos en Colombia señalan que jefes de grupo (sicarios) y varios jefes del escalafón de mando del Cártel Jalisco Nueva Generación y de Los Cuinis fueron adiestrados por las FARC en tácticas de asalto a militares", dijo a Proceso un alto funcionario de Inteligencia estadounidense, que se negó a revelar la dependencia para la que trabaja.
Otro agente de una institución distinta confirmó la información y dijo que se trata de un tema "de seguridad nacional", por lo que Estados Unidos emitió un informe al gobierno de México.
Consultada por la AFP, la secretaría de Gobernación de México declinó hacer comentarios al respecto.
Según Proceso, los narcotraficantes mexicanos entrenados por las FARC no ascenderían a más de medio centenar, pero concretan compras de cocaína a la guerrilla colombiana.
Integrantes de Jalisco Nuevo Generación, considerado ya uno de los cárteles más poderosos de México, organizaron en marzo y abril dos emboscadas en Jalisco (oeste) que dejaron 20 policías muertos. Y el 1 de mayo, en medio de una de las peores jornadas de violencia de Jalisco que dejó 17 muertos (entre ellos ocho uniformados), abatieron con un lanzacohetes RPG un helicóptero del ejército.
La nave oficial perseguía un convoy de hombres armados, en el que se cree viajaba algún miembro destacado de Jalisco Nueva Generación, que lidera Nemesio Oseguera.
Tras el inédito derribo, el cártel hizo una demostración de fuerza con confrontaciones entre pistoleros y fuerzas de seguridad, así como bloqueos de carreteras e incendios de vehículos, gasolineras y bancos en 25 municipios.
Según información del Departamento del Tesoro estadounidense, este cártel ha tejido nexos con organizaciones criminales en Estados Unidos, América Latina, África, Europa y Asia. En abril, esa institución incluyó a Oseguera dentro de su lista de cabecillas extranjeros del narcotráfico sancionados, junto con su cuñado Abigael González, jefe de la banda Los Cuinis y detenido en febrero.
Un jurado federal de Estados Unidos acusó el año pasado a Oseguera y a González de traficar cocaína y metanfetaminas, lo que les habría generado ganancias de más de 10 millones de dólares en un año.
La FARC, que ha negado ser una organización narcotraficante, sostiene desde 2012 diálogos de paz con el gobierno de Juan Manuel Santos, quien visitó México la semana pasada.