BOGOTÁ.- La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) dinamitó este martes en el municipio colombiano de Tumaco, departamento de Nariño, frontera con Ecuador, una torre de energía que dejó sin electricidad a cerca de 250.000 personas de esa zona, informó el Ejército colombiano.
La acción terrorista de las FARC se registró en el sitio conocido como Inda Zabaleta en Tumaco, señaló un informe del Comando de la Fuerza de Tarea Pegado del Ejército.
Este atentado se une al que cometió el domingo esa guerrilla en Buenaventura, departamento del Valle del Cauca, que dejó sin energía eléctrica a unas 400.000 personas y calificado por el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, como "puro terrorismo".
El comunicado del Ejército agregó que la torre de Tumaco fue destruida por integrantes de la columna Daniel Aldana de las FARC, que también volaron la de Buenaventura.
Luego del atentado, tropas del Ejército adscritas a la Fuerza de Tarea Pegaso realizan operaciones de control territorial "con el fin de despejar la zona de explosivos, para que los operarios de la empresa de energía puedan ingresar de forma segura a realizar los trabajos y reparaciones pertinentes".
Según el Ejército, al dejar sin energía eléctrica se causa daño "a la población civil, por la afectación de sus servicios básicos y por ende incurriendo en una infracción grave al Derecho Internacional Humanitario al atacar bienes indispensables para la supervivencia".
El gobierno colombiano y las FARC sostienen desde noviembre de 2012 diálogos de paz para buscar una salida negociada al conflicto armado interno que afecta al país desde hace más de medio siglo.
La destrucción de las torres de energía se engloba dentro de las acciones de las FARC, que suspendieron el 22 de mayo su tregua unilateral iniciada el 20 de diciembre, como consecuencia de la muerte de 27 guerrilleros en un bombardeo de la Fuerza Aérea la noche anterior en el departamento del Cauca.
El operativo, que respondía a la muerte de once militares en un ataque del grupo armado un mes atrás, dio lugar a más bombardeos que por el momento dejan al menos 40 guerrilleros muertos, entre ellos dos antiguos miembros de la delegación de paz de las FARC y el máximo jefe de uno de los bloques de esa organización.