LA PAZ.- Un ex oficial de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) que tuvo contacto con Ernesto "Che" Guevara antes de su muerte, el 9 de octubre de 1967 en la localidad de La Higuera, al sureste de Bolivia, dijo que el mítico guerrillero le confesó que "era más valioso muerto que vivo", según publicó hoy la prensa local.
Jaime Niño de Guzmán, ahora de 72 años, fue el piloto al que le encomendaron la tarea de recoger "con vida" a Guevara, tras saberse de los combates registrados entre efectivos y el grupo de guerrilleros que comandaba.
El ex militar recuerda que arribó a La Higuera junto con el coronel Joaquín Zenteno, comandante de las fuerzas del Ejército y un militar cubano-estadounidense. Aseguró que pudo conversar con el Che, con quien se quedó a solas junto a los oficiales que lo vigilaban.
"Me senté a su lado y, como tenía las manos atadas, le ayudé a preparar una pipa con tabaco. Me causó una impresión diferente de la que había imaginado. Vi a un Che que se veía completamente acabado, tal vez frustrado, decepcionado y completamente agotado, muy decaído físicamente. Estaba con barba y olía mal", comentó.
El ex oficial dijo que creía que Guevara "estaba desesperado por morir". "El Che me aseguró dos cosas: que era más valioso muerto que vivo, tanto para Castro como para la revolución y la guerrilla, y que estaba convencido de que no iba a poder ver el sol al día siguiente", sostuvo de Guzmán.
Relata que volvió a conversar con Guevara después de haberle traído un paquete de tabaco holandés, momento que en que "confesó que se sentía abandonado por Fidel Castro".
Antes de que el uniformado partiera de La Higuera y, a manera de despedida, el Che le obsequió su libretita de anotaciones, de tapa ocre y rojiza, según indica la versión periodística.
De Guzmán cuenta que guarda esa libreta en la cámara de seguridad de un banco y que una revista le llegó a ofrecer unos 20 mil dólares por ella.