Aumenta la preocupación por las sectas satánicas en Francia

PARÍS.- Las sectas satánicas en Francia constituyen un fenómeno de "proporciones alarmantes" con unos 25.000 adeptos en todo el país, de los que el 80% son menores de 21 años, según un informe presentado hoy por la misión francesa dedicada a la vigilancia y lucha contra las sectas (Miviludes).

El informe advierte además sobre el incremento de los suicidios de jóvenes ligados al satanismo y constata que entre enero y noviembre del año pasado se registraron 92 casos, lo que supone multiplicar por tres la cifra de los tres últimos años.

Las sectas satánicas se aprovechan de la fragilidad de algunos jóvenes con problemas de identidad, de ruptura familiar y de fracaso escolar, entre otros.

El informe indica que el conjunto de las sectas emplean métodos innovadores para captar adeptos, como la inducción de falsos recuerdos o la presión con técnicas de "lobby" a organismos internacionales.

Entre las nuevas técnicas, la Miviludes destaca la "instrumentalización regular de la esfera de influencia" aprovechando seminarios internacionales de derechos humanos, y cita como ejemplo el que cada año organiza en Varsovia una institución ligada a la Organización para la Cooperación y Seguridad en Europa (OSCE).

Las sectas emplean "estrategias que explotan todos los medios a su disposición" tanto para difundir sus mensajes como para "desacreditar a aquellos que los combaten", determina el estudio.

Entre ellas destacan métodos como los "falsos recuerdos inducidos", que son el resultado de técnicas de autosugestión o de inducción que ejercen algunos terapeutas.

Estas prácticas "manipulan" al paciente y le incitan a crear el sentimiento de haber sufrido falsos abusos durante su infancia, lo cual resulta devastador tanto para él como para su familia, indica.

Las sectas han adoptado también técnicas derivadas de comportamientos tribales que llevan a pensar que la persona forma parte de un grupo y que es éste, y no el individuo, el que debe tomar las decisiones.

El informe se publica a un mes de la polémica generada por las declaraciones de la directora de gabinete de la Presidencia francesa, Emmanuelle Mignon, quien desacreditó la labor de la Miviludes al decir que "no hace nada".