BUENOS AIRES.- Argentina no cumplirá con la entrega de la totalidad del cupo anual de cortes de carne de alta calidad comercial -denominado cuota Hilton- del ciclo 2007/08 acordado con la Unión Europea (UE), dijeron el viernes fuentes del Gobierno y de la industria.
Argentina es el cuarto exportador mundial de carne y está asignada por la UE como proveedora de 28.000 toneladas de cortes enfriados vacunos sin hueso de alta calidad comercial.
Hasta el jueves, los frigoríficos argentinos aún debían alrededor de 3.500 toneladas de carne pendientes de la cuota Hilton, cuyo ciclo anual finaliza el próximo 30 de junio, dijo a Reuters una fuente del Gobierno que prefirió no ser identificada.
"Nuestra expectativa es poder llegar a unas 25.500 toneladas (de las 28.000 toneladas acordadas) para fin de mes", dijo la fuente.
La UE no sancionaría a la Argentina por no completar plenamente la cuota, aunque importadores, distribuidores, cadenas de supermercados y los restaurantes del bloque, que se encuentran muy molestos, buscarán el próximo año proveedores alternativos, agregó.
La Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA), la encargada del control de las exportaciones de carne, reconoció retrasos en las entregas y atribuyó las demoras a frigoríficos que no gestionaron las solicitudes para la venta al exterior del alimento.
"Con gran asombro, hoy advertimos que una parte del sector privado, que fue beneficiado con cupos de la Cuota Hilton, no actuó con responsabilidad de los compromisos adquiridos", dijo Ricardo Echegaray, presidente de la ONCCA, en un comunicado oficial que fue publicado a fines de la semana pasada.
Según una fuente de la industria, la entrega de los cortes se vio condicionada por una paralización de las exportaciones de carne decidida por el Gobierno y por las huelgas comerciales lanzadas por el sector agrario desde marzo contra un cambio en un impuesto a la venta al exterior.
"A fin de marzo se dejaron de aprobar operaciones de exportación de carne. En abril no se aprobó ninguna. En mayo hubo todo una nuevo esquema para gestionar la aprobación de exportaciones que el sector tuvo que aprender", dijo la fuente de la industria, que prefirió no ser mencionada.
A su vez, en marzo, el Gobierno cambió el impuesto a la exportación de granos y sus derivados, lo que generó una serie de huelgas y protestas que aún paralizaban el comercio interior de granos y hacienda, y que dificultaron la exportación de productos agrarios y agroindustriales.
Las primeras aprobaciones para la venta de carne al exterior empezaron a conocerse el 20 de mayo y los frigoríficos intentaron embarcar en unas semanas la carne que no pudieron exportar en dos meses, antes del cierre el cupo 07/08, añadió la fuente del sector.