LOS ÁNGELES.- El gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, dijo ayer martes que está dispuesto a debatir la propuesta de legalizar y poner un impuesto a la marihuana, lo que a juicio de algunos podría dar una nueva y lucrativa fuente de ingresos para el estado.
La autoridad, cuyo mandato culmina a fines del próximo año, fue consultado respecto a la idea de tratar a la marihuana como al alcohol durante una reunión en el norte de California sobre cómo prevenir los incendios forestales.
"No, no creo que sea el tiempo para ello, pero creo que es tiempo para un debate", sostuvo el gobernador.
"Pienso que deberíamos estudiar cuidadosamente lo que otros países que han legalizado la marihuana y otras drogas están haciendo, qué efectos han tenido en esas naciones y si están felices con esa decisión", añadió.
El otrora actor de Hollywood, quien admitió haber fumado marihuana en el pasado, citó a su Austria natal como un país donde "quieren deshacer algunas de las decisiones que fueron hechas en países europeos", explicó.
Schwarzenegger dijo que la decisión de legalizar la marihuana, que ha estado prohibida en Estados Unidos desde 1937, no debiese tomarse únicamente en la base del aumento de ingresos.
Los comentarios del Gobernador surgen días después de que una encuesta estatal revelara que un 56 por ciento de los votantes en California apoyan la idea de legalizar la venta de la cannabis para su uso recreativo y colocar impuesto a las recaudaciones.
Una propuesta presentada al congreso estatal por el legislador local Tom Ammiano, un demócrata de San Francisco, permitiría eso- ventas de marihuana autorizadas con impuestos a los adultos, mientras que se prohíbe la venta o la posesión a cualquiera menor de 21 años.
Ammiano ha dicho que su propuesta podría generar ingresos por sobre los 1.300 millones de dólares en impuestos para el estado, que enfrenta multimillonarias pérdidas presupuestarias.
Los Votantes en California, el estado más poblado del país, fue el primero en aprobar el uso de la marihuana para uso medicinal en 1996, colocando al estado en aprietos con la ley federal.