LONDRES, ESTOCOLMO.- El xenófobo y anti-europeo British National Party (BNP) logró hoy su primer escaño en el Parlamento Europeo (PE) por el distrito electoral de Yorkshire y Humber, en el norte de Inglaterra, al obtener casi un 8 por ciento de los votos.
Andrew Brons representará en Estrasburgo a esta formación política, que ha puesto en su bandera una legislación más dura en materia de inmigración. Se estima que su exitosa votación se ha visto beneficiada por la crisis económica y por el escándalo del abuso de los gastos de los parlamentarios.
Según las encuestas, el BNP, contra el que recomendó votar incluso la jerarquía de la Iglesia Anglicana por su xenofobia, podría conseguir al menos otro escaño en la Eurocámara.
No es el único partido poco tradicional que logró representación en el PE. En Suecia, el Partido Pirata obtuvo una votación que también le permitirá hacerse de un escaño.
La colectividad, que busca proteger la vida privada de los internautas y legalizar la posibilidad de compartir archivos en internet, habría obtenido el 7,4% de los votos, según una estimación de la televisión pública sueca.
Ultraderecha también logra escaños
Aunque los votantes de Finlandia dieron la mayoría de sus votos al conservador partido Kokoomus (23,2 por ciento), distintos sectores coinciden en señalar como auténtico ganador de estas elecciones al partido ultraderechista Verdaderos Finlandeses.
La formación ultraconservadora consiguió el 9,8 por ciento de los votos —un 9,2 por ciento más que en las europeas de 2004— y un escaño en el Parlamento Europeo.
Su carismático líder, Timo Soini, fue el candidato más votado de toda Finlandia, pero podría igualmente renunciar a ser eurodiputado y ceder su escaño al número dos de su partido.
Según sondeos a boca de urna, la extrema derecha también estaría obteniendo una importante votación en Rumania. El Partido de la Gran Rumania (PRM) estaría sumando alrededor del 7%, cifra que le permitiría lograr dos escaños de eurodiputados.
En Austria, el ultraderechista Partido Liberal Austríaco (FPÖ), que caracterizó su campaña con lemas contra el islam, proclamas antisemitas y crítica radical contra la Unión Europea, alcanzaría entre un 13 y un 14 por ciento de los votos, que le reportarían dos representantes.
