WASHINGTON.- Las autoridades sanitarias estadounidenses recomendaron anoche que los niños y las mujeres embarazadas figuren entre las 160 millones de personas que serían los primeros en ser vacunados contra la influenza humana.
La decisión se adoptó luego de una reunión de emergencia sobre el virus A (H1N1).
En la cita, el Centro de Control para la Prevención de Enfermedades (CDC) estableció cinco grupos en una población de riesgo de 160 millones (más de un estadounidense de cada dos).
"Esto incluye a las mujeres embarazadas, los adultos en contacto con niños menores de 6 años, personal de salud, niños y jóvenes de entre 6 meses y 24 años y adultos débiles", indicó Anne Schuchat, directora del centro de inmunología de los CDC.