LIMA.- Ad portas de la segunda vuelta presidencial de las elecciones peruanas, el candidato nacionalista Ollanta Humala hizo un gesto hacia Chile al referirse a la intención de Bolivia de llevar su reclamo por soberanía marítima ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
En declaraciones a la prensa extranjera acreditada en Lima, el presidenciable dijo que la demanda es un tema "bilateral y no trilateral", coincidiendo con lo que ya había deslizado en marzo pasado cuando pidió ser prudentes frente al caso, ya que sólo "compete" al país altiplánico y a Chile.
En dicha ocasión, afirmó a la emisora "Radio Programas de Perú (RPP)" que lo correspondiente era "no opinar", pues "es un problema bilateral entre Bolivia y Chile, dos países hermanos y deben resolverlo ellos".
Tal postura coincide además con la estrategia que adoptaría su eventual Gobierno frente a los países vecinos, que apunta a profundizar los vínculos. "Fortaleceremos las relaciones peruano-chilenas, necesitamos comprender, ambos pueblos, que vamos a ser vecinos por siempre y qué mejor que llevarnos bien", dijo.
Sus declaraciones además contradicen lo señalado por su asesor en política exterior, Hugo Cabieses, quien en los últimos días ha asegurado que Lima "acompañara" a La Paz "en este esfuerzo".
"Para nosotros la relación con Bolivia es una relación de carácter estratégico", a lo que se suman los "lazos históricos importantes existentes", señaló Cabieses a Red Patria Nueva.
Tema marítimo a la OEA
Desde Bolivia, por su parte, fue anunciado que buscarán que la asamblea de la OEA -que comenzará el 5 de junio en El Salvador- declare su demanda de una salida al mar como un asunto de interés hemisférico.
Así informó el vicepresidente Álvaro García Linera, quien aseguró que intentarán "que se mantenga y ratifique" la resolución del organismo de 1979, en referencia a la asamblea celebrada entonces en La Paz cuando se declaró el reclamo de Bolivia a Chile como "asunto de interés hemisférico" y exhortó a los dos países a buscar una solución negociada.
"Se tiene que hacer un esfuerzo de una buena vez, no podemos seguir arrastrando una deuda histórica por otros cien años", dijo.