VALLADOLID.- La Real Academia prepara un libro de estilo de la lengua española, que pretende convertirse en "un tratado de buenos modales" y ofrecer soluciones concretas para remediar las insuficiencias que se presentan a la hora de redactar en español, tanto en la comunicación privada como en la pública.
Así lo anunció hoy el director de la Real Academia Española (RAE), Víctor García de la Concha, al exponer los proyectos de esta institución y las últimas obras realizadas, en la segunda jornada del Congreso Internacional de la Lengua Española que se celebra en Valladolid.
Ante centenares de asistentes, el director de la RAE dijo que el Banco de Datos del español actual contará con 500 millones de registros dentro de tres años, plazo que también se da la Academia para terminar la nueva edición de la Gramática y poner en la red el Diccionario Panhispánico de Dudas.
De esta última obra, el puertorriqueño Humberto López Morales, secretario de la Asociación de Academias de la Lengua Española, señaló que la RAE trabaja "codo a codo" con las 21 academias asociadas y que en tres años estará ya en la red.
El Diccionario de Americanismos es otro de los proyectos que hay en marcha, mientras que la Escuela de Lexicografía Hispánica comenzará a funcionar en enero de 2002 y en cinco años "habrá formado a cien jóvenes lexicógrafos" procedentes de Hispanoamérica, añadió López Morales.
El Libro de Estilo de la Lengua Española surgió para resolver las dudas que plantearan las publicaciones académicas, pero posteriormente se pensó que podía servir como obra de referencia "en general", señaló el director de la RAE.
"El español tiene en la Ortografía académica una especie de código civil y el libro de estilo trata de ser en cambio un tratado de buenos modales", añadió.
Muchos medios de comunicación tienen su propio libro de estilo, pero al "estudiante que prepara un trabajo o al profesional que debe redactar un informe" puede serles útil esta nueva obra.
En 1990, la Academia se embarcó en un profundo proceso de renovación, uno de cuyos principales frutos es el monumental Banco de Datos del Español que cuenta ya con 270 millones de registros en sus dos grandes apartados, el CORDE (Corpus de Referencia Diacrónico del Español) y el CREA (Corpus de Referencia del Español Actual).
La Academia ha puesto en marcha la tercera fase de ambas secciones y prevé que para el 2004 el CREA, que recoge el español de los últimos 25 años, tenga unos 500 millones de registros, mientras que el CORDE, que analiza nuestra lengua desde sus orígenes hasta 1975, llegue a los 300 millones de formas.
La nueva edición del Diccionario de la Lengua, que llegó el martes a las librerías españolas, está ya en la red y cuenta con una página web en la que se podrán dejar plasmadas "sugerencias y críticas" y en la que la Academia incluirá los nuevos términos que se admitan.
El Diccionario Histórico es "el gran reto" que tiene planteado la Academia, aseguró García de la Concha, quien anunció que el próximo febrero se reunirán en San Millán de la Cogolla (España) expertos para estudiar el proyecto.
La Gramática estará finalizada en tres años y en su redacción están tomando parte activa las academias hispanoamericanas de la Lengua, concluyó el director de la RAE.
