ESTRASBURGO.- Italia no debe restituir la obra de Van Gogh "Retrato de un joven campesino" a un galerista suizo, según decidió hoy el Tribunal Europeo de Derechos Humanos en Estrasburgo.
Roma debe pagar, sin embargo, al galerista una indemnización de 1,3 millones de euros (unos 1,2 millones de dólares). Con esta sentencia, termina una disputa legal que se extendió por casi veinte años.
El galerista con residencia en Basilea compró la pintura de Van Gogh en 1977 en Italia a un intermediario por aproximadamente 310.000 euros (unos 285.000 dólares) sin dar a conocer su identidad.
En 1983, el Ministerio de Cultura italiano se enteró de que el galerista era el propietario del cuadro. Cuando éste quiso venderlo en mayo de 1988 por 8,5 millones de dólares a una asociación estadounidense, Italia hizo valer su derecho de preferencia.
Sin embargo, Roma compró la obra al precio de 1977 con el argumento de que el galerista le ocultó su nombre al Ministerio en aquel entonces.
Los jueces en Estrasburgo consideraron que Italia no violó el derecho a la propiedad al hacer valer su derecho de prefencia. Sin embargo, Roma debe indemnizar al galerista por el hecho de que tuviera que vender el cuadro en 1988 al precio de 1977.