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¿Una galería de arte en la calle?

GaleríaCallejera se llama el proyecto de Pablo Rojas, un pequeño remolque de auto que fue adaptado para exponer de aquí en adelante lo que sea, donde sea.

23 de Febrero de 2005 | 12:04 | Ilona Goyeneche, El Mercurio en Internet

Pablo Rojas
Este artista que egresa el 20 de abril, y que inventó su propia galería móvil, le interesa más ser el director de está que su artista. Aunque con este proyecto no se ha alejado de su proceso creativo. "Tengo un rollo fuerte con la movilidad y lo automotriz. Todas mis instalaciones las hacía en base a parabrisas de autos. Pero después me di cuenta que es muy pesado y complicado y decidí concentrarlo en una galería muy pequeña donde no sea necesario hacer grandes instalaciones para mostrar el trabajo. Si no, más bien, te obliga a una suerte de concentración de ideas", explica Rojas que ha expuesto en galerías como Cine Arte Alameda, Galería Balmaceda. Ó el Centro Cultural de España.

La GaleríaCallejera
No más de 300.000 pesos le costó este cubículo dedicado al arte. La mini galería, construida sobre un carro de arrastre, fue hecha con materiales como maciza, madera, aluminio y vidrio. Aparte de eso cuenta, al igual que las galerías tradicionales, con iluminación dicroica. Lo único que le falta a esta GaleríaCallejera para que funcione totalmente independiente, es un generador.
SANTIAGO.- Alrededor del arte, las obras, sus creadores, museos y galerías siempre ronda un mismo desafío que pareciera no encontrar solución definitiva: ¿Cómo hacer más accesible el arte? Pablo Rojas (30) estudiante de Bellas Artes de la Universidad de Arcis le dio una solución a este problema con su proyecto de título llamado: GaleríaCallejera.

"Como artista siempre me ha preocupaba la burocracia a la hora de exponer. Uno deja estacionada la obra en la galería y tu como artista de retiras. La gente la visita prácticamente sólo para la inauguración y después ya no va más. Lo que quiero es que la obra esté permanentemente reciclándose a sí misma y también en cuanto a público", explica Rojas, "quiero que rompa además ese estrato socioeconómico que tienen la galerías y proponer esta única galería que puede ir a todos lados".

Después de ver la película "Una historia sencilla" de David Lynch, donde un tipo lleva detrás de sus auto su casa completa, Rojas pensó "y por qué no llevar mi galería completa a todos los lados". La idea inicial era mucho más grande pero la falta de presupuesto lo obligó a empezar en chico. Transformó así un simple carro de arrastre en una galería: una cabina blanca que no supera un espacio de 1.60 x 1.10 x 1,20 mts. y con tres ventanas que dejan mirar a su interior.

"La idea principal es que me pueda movilizar en mi auto y, simultáneamente, exponiendo en mi galería que llevo atrás", explica el creador de este proyecto que hace sólo cuatro meses aún era una idea. La galería ya lleva en su currículum dos exposiciones. Una en noviembre pasado cuando, al frente de su universidad, exhibió un documental de cómo se hizo la galería misma. Y una segunda vez, el 5 de enero pasado, frente a la Galería Animal.

¿Cuál ha sido la reacción de la gente?
La idea es súper seductora y el público tiene muy buena onda con este proyecto. Los niños tienen un rollo como que les parece un carrito de helado. Es muy afable el artefacto y la gente se acerca a mirar. Esa misma seducción hace que vean las obras que quizás en otro espacio no la verían.

Al final la galería es una obra en sí.
Exactamente, es una obra que contiene otra obra. Entonces está esa problemática: cómo hacer una obra interna para que la GaleríaCallejera no se la coma. Ese es un reto.

¿La idea es llevar siempre contigo la galería o también dejarla por un tiempo en algún lugar?
Tiene esa dualidad. Quiero que esa decisión la tome el autor que está exponiendo, dependiendo de la particularidad de su obra. Si necesita que la obra se detenga en el lugar que sea, se hace, si no, será una obra que se mueve constantemente.

La próxima exposición de la GaleríaCallejera será el 16 de mayo (hasta el 12 de junio) en el patio central del Centro de Arte Alameda. Cuatro artistas emergentes expondrán, cada uno una semana "una instalación de pequeño formato", como la denomina Rojas. "Un desafío para los artistas que están acostumbrados a exponer en los espacios grandes de las galerías". Eso también condicionó la elección de los artistas. "Los elegí netamente por sus trabajos que se pueden reducir en pequeñas cosas y que no trabajan grandes instalaciones", explica el curador, creador, director, carpintero y relacionador público de la GaleríaCallejera.

En tu galería cabe prácticamente una sola obra.
Claro. Pero también depende. La idea este año, y por eso digo que aún no está terminada la tesis, es hacer una colectiva de 10 personas dentro de la galería. Imagínate lo que será eso, para empezar los artistas tendrán que ponerse de acuerdo sobre qué hay que mostrar y cómo, para que haya espacio para todos. No será fácil.

¿Un solo lienzo podría ser hasta un poco aburrido y perderse en tu galería?
Creo que no ya que es el artista el que se tiene que moldear al espacio. Estoy muy abierto a cualquier disciplina, incluso he pensando en el teatro, aunque aún no sé como se puede hacer. No quiero que la galería se torne en un lugar exclusivo de artes visuales. Podría tener un performance, por ejemplo, alrededor de ella, no sé. Que se abran un montón de posibilidades.

Igual la galería limita el espacio.
Quizás por eso requiere sólo una concentración de la obra, lo justo y necesario de ella. Obliga exprimir la idea hasta agotar los recursos. La idea es que este mismo espacio estrecho no sea un problema para el artista, sino un desafío.

¿Cómo manejas el tema de la iluminación, por ejemplo, que también es totalmente diferente a una galería tradicional? En parte porque cuenta con luz natural.
Ahí se da todo un tema con el reflejo de luces. A mí me interesan todas estas interrogantes, y que se den através de los proyectos. Es el autor el que finalmente le dará las características esenciales a la galería: cómo moverla, dónde ponerla, qué luz quiere, etc. Todo eso lo maneja el arista y eso es muy interesante ya que de alguna manera se transforma en el co-dueño de la galería.

¿Los proyectos futuros son seguir teniendo más carros?
Primero que nada necesito tener una difusión cada vez más potente. Necesito que me lleguen proyectos de artistas emergentes y/o consagrados y aumentar los eventos dentro de la galería. Por otra parte me interesa incluir colegios en este proyecto. Que la galería vaya a establecimientos educacionales, y no sólo eso, también el artista para que les explique en términos simples y directos a los alumnos, que no están muy conectados con el arte, de qué se trata su obra. Finalmente quiero romper también la circulación dentro de Santiago e ir a regiones.

Al director de esta galería en miniatura aún le falta un generador para ser totalmente independiente. Actualmente necesita estar cerca de una fuente de energía para iluminar el interior de la galería y la obra, si ésta lo requiere.

Sí la idea original fue un carro más grande. ¿El día de mañana podría ser una casa rodante que la habilitas para que sea una galería?
Exactamente. Y viviendo ahí dentro. ¡Sería increíble!
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