BEIJING.- El tenor italiano Luciano Pavarotti se despedirá hoy, sábado, del público chino con un concierto en Beijing, dentro de su gira mundial de despedida, con el que finaliza su paso por el gigante asiático, que lo llevó también a Shanghai.
A sus 70 años, el maestro subrayó antes del concierto en la capital que los cambios acaecidos en China desde que la visitó por primera vez, hace 20 años, son "increíbles".
En aquella ocasión, el tenor italiano interpretó con su compañía "La Boheme", de Puccini, y desde entonces se ganó el favor de los aficionados locales, por los que dice sentir un cariño muy especial.
En un gesto de complicidad para todos esos seguidores, Pavarotti no dudó en enfundarse ayer un vestido tradicional de la Opera de Beijing, con el que se dejó fotografiar por periodistas y aficionados.
Además de su primera visita, otra de las actuaciones más recordadas del "divo" es la que ofreció, junto con los españoles José Carreras y Plácido Domingo, en la Ciudad Prohibida en 2001, a fin de apoyar la candidatura de Beijing a los Juegos Olímpicos de 2008.
Con el trío de tenores, actuaron también seis cantantes chinos, entre ellos Dai Yuqiang, al que Pavarotti decidió acoger como pupilo y que se ha convertido en una de las grandes estrellas de la ópera de China.
Durante su estancia en Beijing, el tenor italiano subastará un coche regalado por la compañía DF-NISSAN, y los fondos obtenidos servirán para construir una escuela para niños chinos sin recursos.
Las entradas están prácticamente agotadas, según los organizadores del concierto, y como puede comprobar cualquier viandante, la red de revendedores y falsificadores se empieza ya a concentrar en la inmediaciones del estadio.
