Con un show casi biográfico el jueves 20 de julio en el Teatro Teletón de la capital, la cantante probó todos los éxitos que tiene y la marca de haber crecido en los ‘90.
David Ponce
Su próximo concierto será el 5 de agosto en Blondie (foto: Camila Galarce, zona.cl). |
Nicole no dejó ni una de las diez canciones de su nuevo álbum,
Apt. (2006), sin cantar la noche del jueves en el Teatro Teletón: por algo era un lanzamiento. Pero tampoco dejó pasar la ocasión especial de montar una jornada larga, biográfica, con música de cuatro de sus cinco discos, que fue al mismo tiempo un reencuentro con sus fans y una afirmación casi generacional de su identidad.
Un teatro rockeramente despojado de sus butacas fue el escenario para el concierto, que la cantante encaró con guitarra acústica o eléctrica, fiel a un disco nuevo que descansa sobre bases electrónicas pero suele tener una guitarra al frente. Su afinación siempre es certera, incluso cuando se ve forzada a cantar más fuerte sobre el alto volumen de su banda, y con mayor razón se oye bien en una grata versión acústica para la canción "Viaje infinito", a sólo dos guitarras y dos voces.
Porque también hay espacio para otros registros en el repertorio, entre el pop rock de su disco
Esperando nada (1994) y el innegable gusto por el acid-jazz de canciones como la propia "Viaje infinito" y "Háblame", de
Viaje infinito (2002). Y esos son los límites. Nicole dejó pasar la ocasión de grabar, por ejemplo, un reggaetón en
Apt. que le podría haber reportado "actualidad", y en cambio se siente la raigambre de haber crecido en los ‘90, desde el sonido reconocible de su banda hasta el humo que muchas veces invade el escenario.
En ella parecen convivir esas dualidades. Las solventes tres pantallas de fondo fueron empleadas tanto para proyectar "visuales" en las canciones nuevas como para pasar intactos los noventeros videoclips originales. En "Trapping in time" ella proyecta imágenes de sí misma en películas de niña, y en "Bipolar" corta y pega con todas sus letras a Spiniak, Schaefer, Gemita Bueno y al cura Tato. Confía en las bases electrónicas, pero seguro cree que es más genuino tocar la guitarra, y de hecho tiene razón cuando en "1 800 nasty show" se ve y suena realmente bien guitarreando al mando de su grupo.
La produción especial del show también incluyó a invitados. Juan Sativo, rapero de Tiro de Gracia, subió a cantar en la festiva canción "Vida", y hacia el final el dúo Marciano acompañó a Nicole en "Siempre", una canción en la que el bajo de Pablo Castro nunca sonó con nitidez y Sergio Lagos mostró que con franqueza cantar y tocar la guitarra le sale peor que animar realityshows y filmar comerciales de multitienda. Lo mejor del show de Nicole es Nicole. Y lo es más con un repertorio de frecuentes éxitos que, aunque ella misma conspira contra la sorpresa al anunciarlo con frases como "ahora vamos a recordar", está recreado en nuevos arreglos y casi nunca la audiencia puede predecir lo que viene a continuación.
Esa misma audiencia justificó los dos bises del concierto. Entre fans acérrimos que le gritaban su amor y adultos jóvenes sonrientes que recordaron que "Dame luz" era la canción de una teleserie del canal católico chileno gracias al virginal y angelical video de Herval Abreu proyectado en vivo, Nicole no sólo mostró los muchos éxitos que tiene, sino además el tiempo en el que empezó. Al final, "Sin gamulán" fue el regreso más claro a un mundo sin gamulán, sin google, sin ringtones ni tarjetas de prepago para el celular, con la imagen de una niña de diecisiete años cantando sobre un columpio y con la Nicole actual sobre el escenario. Doce años más tarde, fue un lanzamiento, pero con historia.
Las canciones
Sólo su primer y preadolescente disco
Tal vez me estoy enamorando (1989) queda fuera de la selección del concierto de Nicole, que en vivo canta las diez canciones de su reciente
Apt. (2006), cuatro de
Viaje infinito (2002), tres de
Sueños en tránsito (1997), cuatro de
Esperando nada (1994) y una del disco
Absoluto (2005), del dúo Marciano. Ésta es la lista del show.
Si vienes por mí (2006).
Culpables (2006).
Esperando nada (1994).
Bipolar (2006).
La última vez (2006).
Despiértame (1997).
No me confundas (2006).
Trapping in time (2006).
Viaje infinito (2002).
Noche (1997).
Todo lo que quiero (1997).
Vida (2002).
Rapture, de Blondie (2006).
Háblame (2002)
El camino (2006).
Veneno (2006).
Dame luz (1994).
Lágrimas de sal (2002)
Sirenas (1997).
Sólo el mar (1994)
1-800 nasty show (2006).
Siempre, de Marciano (2005)
Sin gamulán (1994).
