NUEVA YORK.- La ausencia de los líderes de Van Halen y la entrada, por primera vez, de una banda de hip-hop en el Salón de la Fama del Rock marcarán mañana la tradicional fiesta con que se celebran las incorporaciones anuales a esa institución.
El acto se celebrará en el prestigioso Hotel Waldorf Astoria de Nueva York, donde tendrá lugar el primer ingreso en el Salón de una formación de hip-hop, Grandmaster Flash and the Furious Five, pero donde se echará de menos a los dos principales miembros de Van Halen, Eddie Van Halen y David Lee Roth, aunque por distinto motivo.
El guitarrista Eddie Van Halen no asistirá a la ceremonia porque se ha tenido que someter a un programa de desintoxicación, según anunció el propio artista en un comunicado dirigido a sus seguidores y colgado en su página web.
"Ahora mismo no me siento capacitado de daros lo mejor de mí. Por esa razón, he decidido iniciar la rehabilitación para que, en el futuro, os pueda devolver el 110 por ciento de lo que creo que os debo", aseguró Van Halen en el escrito.
El texto no precisa a qué tipo de "rehabilitación se somete el músico aunque, según el diario "Newsday", serían sus "problemas con el alcohol" los que habrían obligado a su hospitalización.
El comunicado de Van Halen vio la luz tan sólo unas horas después de que el que fuera el cantante original de la banda, David Lee Roth, anunciara que no iba a asistir al ingreso de la banda en el Salón de la Fama porque no podrá "cantar" en el acto.
La organización del Salón de la Fama tiene previsto que la formación Velvet Revolver interprete algunos temas de Van Halen, algo que parece no haber sido del agrado del que fuera cantante de la banda durante su primera década de existencia.
Roth también se iba a unir al resto del grupo de Los Ángeles para hacer una gira de reunión por Estados Unidos, tal y como anunció la formación meses atrás, pero finalmente el cantante se desentendió del proyecto.
La gira queda así en el aire, ya que Eddie Van Halen reconoció en su comunicado que su rehabilitación puede provocar cambios en el tour, aunque no determinó en qué medida.
Ante esta situación, se espera que sólo Sammy Hagar, quien también fuera cantante de la banda, y el bajista Michael Anthony, estén en la ceremonia, donde compartirán el homenaje de la industria con Patti Smith, R.E.M. y The Ronettes, los otros artistas que ingresan en el Salón, además de Grandmaster Flash and the Furious Five.
Es precisamente la entrada de este último grupo lo que da, no obstante, un carácter sin precedentes a la elección este año de los artistas que se incorporan al selecto club donde conviven los nombres más ilustres del Rock and Roll.
Pioneros en la revolución que supuso el hip-hop para la música en los ochenta, Grandmaster Flash and the Furious Five es el primer grupo de ese tipo de música que se incorpora al Salón de la Fama.
Populares gracias a temas como ’The Message’ o ’Beat Street Breakdown’, habían sido nominados con anterioridad en dos ocasiones (2004 y 2005), pero no fueron reconocidos con ese honor hasta las votaciones de 2006, en las que participaron 500 músicos, ejecutivos de discográficas y periodistas especializados.
El Salón de la Fama del Rock tiene en Cleveland un museo en el que se exponen recuerdos, vestuarios e instrumentos originales de las estrellas de la escena musical.
Cantantes como Elvis Presley, Ray Charles, James Brown, Chuck Berry, Aretha Franklin y Bob Dylan comparten el honor de formar parte del Salón junto a bandas como los Beatles, los Rolling Stones, AC/DC, Queen, The Police, The Clash o U2.
A ellos se habían sumado en la anterior edición de 2005 los grupos Black Sabbath, Sex Pistols, Blondie y Lynyrd Skynyrd, así como el trompetista Miles Davis, que se convirtió en el primer músico de jazz que entró en el Salón de la Fama, al que sólo pueden acceder artistas que hayan grabado su primer disco 25 años antes de su nominación.