Tras revisitar sus raíces rancheras en el disco Mi verdad, el mexicano vuelve a la balada romántica en este álbum producido por Emilio Estefan y donde muestra una capacidad interpretativa que sorprende cuando logra el dramatismo propio del género. Aunque eso no pase siempre, este es un disco correcto, equilibrado entre la emoción y el profesionalismo.
Sergio Fortuño