A la cola por favor.
¿Qué tienen en común Meat Loaf, Linkin Park y Emma Shapplin? Porque todas las mezclas son posibles, la industria nos presenta a Evanescence. Un dúo de Arkansas la cantante Amy Lee y el guitarrista y autor Ben Moody que entró por la puerta ancha con la canción de "Daredevil". Dramáticos, casi operáticos (góticos, se supone), Evanescence son la nueva carta del sello Wind Up, que todavía se soba las manos gracias las ventas multiplatino del rock cristiano y acartonado de Creed. Si antes Evanescence se inclinaba por las baladitas al piano (como la versión original del single "Bring me to life"), ahora apuntaron a las guitarras duras y ya en retirada del nü metal, y a unas gotas de hip hop. La hermosa voz de Amy Lee debe lidiar con cajitas de ritmo que anteceden a riffs predecibles y ansiosos del Top 1. Con un piano, Lee quizás merezca atención. Pero jugando a la próxima estrella que el rock necesita, que pase el siguiente.
Marcelo Contreras.
