Perdidos en Londres
Si usted levanta este disco compacto de su caja y observa el mapa esquemático de las líneas férreas y las infinitas estaciones del metro más antiguo del mundo, lo más probable es que usted no entienda ni medio. Si además no ha tenido la posibilidad de salir de estas fronteras, mejor ni siquiera invertir tiempo en dar con una lógica satisfactoria para la apreciación del mapa maestro de la capital británica. De seguro, estará más extraviado de lo que quedaron los cinco jazzistas chilenos —algunos definitiva y esencialmente perdidos— que en mayo pasado tocaron en Derry, Leeds y Londres como parte de una inédita gira musical.
Después de escuchar las historias por los protagonistas, "Perdidos en Londres" es una expresión imposible de superar en asertividad. Lo sabemos bien quienes no manejamos el inglés como herramienta a la mano. Menos con aquel acento
brit lleno de exquisiteces y menudencias que de pronto nos hacen reconocer que nuestros oídos fueron acostumbrados a escuchar sonido de tarros. Por eso el disco
Perdidos en Londres es un anillo en el anular. Si no, pregúntenle al baterista de este estelar quinteto, el magnífico Carlos Cortés, quien vivió con la soga al cuello durante toda su estadía en las Islas Británicas, sin saber dónde estaba, con quién hablaba, ni de lo que se hablaba. Lo suyo es el bop agresivo tras los tambores. Para qué comunicarse con palabras.
El Chilejazz Quinteto ha dejado registrado su nacimiento fortuito en el verano de 2004, su crianza en los clubes y festivales británicos y su adultez en los escenarios nacionales de una minigira que terminó de consolidarlo como la all stars de los 2000. Porque si alguna vez los mejores jazzistas estuvieron en conjuntos como Los Ases Chilenos del Jazz (en los años 40), en el Nahuel Jazz Quartet (en los 60), en Coda (en los 80) y en Los Titulares (en los 90), el turno ahora es para estas cinco puntas de lanza reunidas como Chilejazz Quinteto: el saxofonista Ignacio González encabezó Motuto y Cyberjazz y además es el alma gemela de Cristián Cuturrufo, otro de los solistas importantes del jazz actual, cabecilla de sus propios quintetos y músico que acaba de editar
Jazz de salón junto al pianista Valentín Trujillo. La sección rítmica está formada por Federico Dannemann, guitarrista de la Swing Experience y del grupo de Francesca Ancarola, Rodrigo Galarce, contrabajista del Carlos Silva Trío, Roberto Dañobeitía Quinteto, Supertrío y Francesca Ancarola, y Carlos Cortes, batería del David Pérez Cuarteto y el grupo acidjazzero Alüzinati.
Son cinco estrellas del momento, que por empaste colectivo, propuesta bop y la trascendencia del trabajo realizado en 2004, han convertido a
Perdidos en Londres en el mejor disco jazzístico de un año plagado de producciones. Una colección de piezas que nivelan muy bien dos aspectos importantes en el jazz de la troncal: solos libres y expresivos versus melodías cantables. En ese escenario, mucho del resultado corre por cuenta de Dannemann, quien no sólo arregló canciones de la tradición latinoamericana como "La bikina", "Arenosa" y "Mi tripón", sino que además escribió otros tres temas para un cancionero moderno
hecho en Chile: la festiva "Choriño", una rítmicamente intrincada "Tony's changes", y la hardbopera "Yo quiero ser un titular!", pieza que en su doble fondo es un irónico tributo al baterista Pancho Molina (líder de Los Titulares). Aunque como sabemos que tanto Cuturrufo como Galarce han integrado esta banda, suponemos que es una joda y nada más. Más valdría.
Íñigo Díaz
Chilejazz Quinteto, "Perdidos en Londres" (2004, independiente)
1. La bikina, 2. Choriño, 3. Mi tripón, 4. Tony’s changes, 5. Putu, 6. Arenosa, 7. Yo quiero ser un titular!
Personal: Ignacio González (saxo alto, saxo tenor), Cristián Cuturrufo (trompeta), Federico Dannemann (guitarra, cuatro, cavaquinho), Rodrigo Galarce (contrabajo), Carlos Cortés (batería).
Músicos invitados: Agustín Moya (saxo tenor), Lautaro Quevedo (piano eléctrico), Ernesto Artimes (percusiones).
Duración: 47:25
Producción: Chilejazz Quinteto y Daniel Lencina Jr. |
