Amaral es el amable reverso de aquella costumbre del pop español por la rima fácil, el coro adictivo y los episodios románticos de aire estival y quinceañero. Eva Amaral y Juan Aguirre, que están a punto de visitar Chile para un concierto en el capitalino Teatro Oriente, son los nombres tras este dúo. Cantan sobre corazones estrujados y dudas existenciales, pero saben cómo dar un par de giros más a las mismas tuercas. Sus intenciones líricas rozan el impulso gótico, muy a tono con los rostros pálidos y circunspectos de ambos en las fotos del disco. Mientras, sus carriles musicales se dirigen hacia el pop melódico que no descuida ni la fuerza ni la ornamentación orquestal. De la invasión hispana, es lejos la mejor carta.
Marcelo Contreras